Testigos de la tragedia

El terremoto se ha dejado sentir en más regiones que en Amatrice, Accumoli y Arquata, las tres zonas más afectadas.

El terremoto se ha dejado sentir en más regiones que en Amatrice, Accumoli y Arquata, las tres zonas más afectadas. En Perugia, a dos horas de camino de Amatrice, Annalisa Volpone, profesora en la Universidad de la ciudad, ha comentado a LA RAZÓN cómo: «El primer temblor ha sido larguísimo, como de 20 segundos». Sin embargo, la réplica, una hora después, fue un poco más corta. Según ha comentado a este medio, la tierra aún sigue temblando y todavía se sienten las réplicas.

Malena Llamoca, joven residente en Perugia, ha declarado a este medio cómo el seísmo no le ha pillado del todo desprevenida, ya que ella proviene de un país con un alto nivel sísmico: Perú. «En verdad yo soy peruana, estoy acostumbrada a los temblores y hacía mucho tiempo que no vivía uno. Sentí que el que tuvo lugar el lunes por la noche era intenso, pero me acordé de uno que viví cuando era niña. Como esa vez, a pesar de que fue fuerte, todos en casa salimos a salvo, me tranquilicé».

El seísmo le pilló cuando visitaba con su pareja a los padres de su novio, que es italiano. Fue este mismo el que le despertó en dos ocasiones durante la noche. De hecho, el temblor y alguna replica consiguió levantar a todos los habitantes de la casa. «Su madre estaba desesperada», ha rememorado Malena, «se puso a rezar».

Annalisa indica que Italia es una zona con gran actividad sísmica, y la prevención para el futuro reside en las escuelas. Sin embargo, añade que «los lugares más dañados, Accumoli y Amatrici, ya no existen, el terremoto los ha destrozado en pocas horas. En Umbría no ha habido heridos» sino que sólo se han producido «daños a edificios».

Malena Llamoca opina, por su parte, que lo que ha hecho tan «brutal» el seísmo que ha sacudido las localidades (con especial fuerza la localidad de Amatrice) ha sido «el hecho de que es una ciudad muy antigua con construcciones históricas»: «Supongo que, como no es una zona sísmica, muchas casas no tenían las condiciones para resistir el seísmo».