Kim Jong Un en España

El régimen norcoreano abre Embajada en un lujoso barrio de Madrid para fomentar las relaciones diplomáticas bilaterales

El hermético régimen de Corea del Norte ya tiene Embajada en España. En un exclusivo barrio residencial de las afueras de Madrid se ha instalado la legación diplomática cuya misión es establecer «principalmente lazos culturales con España y tener representación». Lo cuenta Alejandro Cao de Benós, delegado honorario de Corea del Norte, quien ha ayudado a elegir edificio y ubicación al departamento de Exteriores de Kim Jong Un. Además del embajador Kim Hyok Chol, que el miércoles presentó sus cartas credenciales al Rey, ya hay dos secretarios norcoreanos en la sede diplomática desde finales de diciembre que tienen experiencia en otras embajadas. Próximamente, se trasladará a Madrid un ministro consejero. En total, cuatro familias a las que Cao de Benós, –español y, por cierto, el único occidental que trabaja para el Gobierno comunista–, asistirá para que se amolden a la vida madrileña. La embajada no hará labores consulares, pues hasta la fecha no residía oficialmente ningún norcoreano en España, admite Cao de Benós, quien sí que, puntualmente, ya ha traído a ocho jóvenes para que aprendan fútbol profesionalmente en Barcelona y está a la espera de que la burocracia le dé luz verde para traer a unos acróbatas al festival internacional circense de Figueres el mes que viene. Desde que se abrió ligeramente el país a los viajes organizados y en grupos, Pyongyang también establece el turismo como una prioridad, por tanto «también se trabajará con la Organización Mundial del Turismo (OMT) con sede en la capital y de la cual Corea del Norte es miembro».

Algunos analistas aseguran que Kim Jong Un intenta dar «seriedad» a su país con la apertura de embajadas en el mundo. En Europa, según señala Michael Madden, investigador en el liderazgo de Corea del Norte, Pyongyang tiene cinco importantes bases de operaciones. «En Berna, Suiza, donde el embajador gestiona la actividad diplomática y el intercambio con Europa, el Norte de África y Asia Central; en Viena, Austria, finanzas, intercambios comerciales e importaciones; en Praga, República Checa, donde se organizan las misiones diplomáticas en el centro y este europeo; en Londres, países del oeste y misiones extranjeras; y París, a través de su delegación de la Unesco», describe Madden. Cao de Benós señala que es cierto que «en Francia no hay embajada porque, por indicación de EE UU, no ha desarrollado relaciones bilaterales. Es el único país de Europa».

Madden indica que, pese a todo, siempre se ha creído que durante los años 80 los servicios de Inteligencia norcoreanos se establecieron en París. En la actualidad, algunas fuentes afirman que las labores de Inteligencia se desarrollarían desde Reino Unido. Para el investigador, la apertura de la Embajada en España podría significar que Madrid reemplazará a Londres en ser el centro neurálgico para Europa occidental. Sin embargo, el delegado honorario para Pyongyang hace hincapié en que «la nueva embajada se va a centrar exclusivamente en España, ni siquiera se encargará de Portugal».

El mundo diplomático en Madrid es muy cerrado y posiblemente, a partir de ahora, coincidan más de una vez el embajador norcoreano con el surcoreano. «Claro que se encontrarán e incluso se saludarán, pero nunca mantendrán una conversación», pues según recuerda Cao de Benós, «un surcoreano no puede tratar a un oficial de Corea del Norte sin permiso de su Gobierno. Esto es así por ley». Al menos en 2014, Pyongyang no abrirá ninguna legación diplomática más. «La zona más olvidada de Corea del Norte es América Latina, donde sólo tenemos representación en Brasil y en Perú. Yo creo que un futuro, se tenderá a abrir una Embajada en Caracas».

El edificio, situado en una lujosa zona de Aravaca, tiene todavía un saco de cemento en la puerta, pero ya ha colgado un relieve con el emblema nacional de la República Popular de Corea del Norte en la fachada interior. Cabe recordar que todas las formalidades para abrir una Embajada –desde su solicitud a su beneplácito gubernamental en octubre, así como la aprobación en el Consejo de Ministros el 13 de diciembre, y la presentación de credenciales al Rey–, se han cumplido a raja tabla. Curiosamente, la sede diplomática en Madrid del llamado «país más aislado del mundo» no tiene edificios a los lados, sino dos vacíos y enormes solares. Y si se llama a su puerta, aunque haya norcoreanos dentro, nadie responde.

Un importante cargo

El representante norcoreano en España es Kim Hyok Chol, quien antes de viajar a Madrid ha sido «embajador itinerante». «Se trata de un cargo poderoso porque estos diplomáticos pueden negociar y hacer acuerdos básicos sin tener que enviar una delegación viceministerial», explica a LA RAZÓN Michael Madden. Para tener idea de la importancia del cargo, Madden añade que el último que ocupó el puesto de «embajador itinerante» para los países occidentales, Ri Yong Ho, es actualmente viceministro de Exteriores y lidera las interacciones con EE UU y las conversaciones a seis bandas. Es más, «Ri fue quien logró que se establecieran relaciones con la UE a principios de 2000». Por tanto, Madrid podría ser el último puesto de Kim antes de su ascenso.