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Lorena Van Heerde: Gazpacho «made in» Holanda
La herencia culinaria de sus padres está muy presente en su cocina. Adora el saté.
Su selfireceta: Gazpacho de tomate amarillo. La herencia culinaria de sus padres está muy presente en su cocina. Adora el saté.
Su Selfireceta: Gazpacho de tomate amarillo
Ingredientes:
-1/2 barra pan sin corteza-Un trozo pequeño de mango natural-2 dientes de ajo-2 cucharadas de vinagre -1 cucharadita de azúcar en polvo-1 kg de tomates pera amarillos-110 ml de aceite de oliva extra virgen-4 tallos de apio-1 cebolla blanca grande-Bogavante-Cayena molida-Perejil rizado-Sal y pimienta.
Consejos:
El sorbete de tomate lo compre en el mercado de mi casa (es muy fácil prepararlo con la Thermomix), pan tostado como en la foto y perejil cebollino para decorar, no es necesario.
Cuando uno mira de arriba abajo a Lorena Van Heerde, lo primero que se le pasa por la cabeza es la esclavitud gastronómica a la que se debe someter a diario para tener un cuerpo 10. Pues bien, quítense esa idea preconcebida de que las modelos no comen sino que sólo pican (y en contadas ocasiones), o al menos esta alicantina rompe con todos los moldes. Se declara comedora empedernida y cocinera atrevida, un maridaje que poco tiene que ver con la controvertida Dukan o el manido suplicio del batido. Y es que pensándolo bien y escuchando las palabras de Lorena, importa más el cómo se come que el qué se come. Por eso ella intenta cada día acercarse al mercado que tiene al lado de casa, otea los puestos y elige los mejores productos. Pregunta, charla y busca consejo en los expertos fruteros, verduleros, carniceros y pescaderos. Así comienza sus aventuras culinarias. «Aunque siendo realistas no siempre puedo acercarme al mercado, así que opto por hacer ‘‘macrocompra’’ en el supermercado y listo», asegura.
A pesar de no parar de trabajar y de compaginar las pasarelas con sus estudios universitarios, Van Heerde siempre encuentra algunas horas para dedicarlas a su devoción culinaria. «A diario me cuesta bastante sacar tiempo para cocinar, pero durante el fin de semana me encanta probar cosas nuevas. Me gusta mucho preparar platos calientes como estofados, lentejas, conejos a la cazuela con ciruelas y laurel... sólo de pensarlo ya estoy salivando», dice la modelo. Además, es práctica, cuanto menos se manche, menos hay que recoger así que... el horno es su mejor aliado. «El pollo a la naranja con puré de patatas me sale riquísimo», asegura orgullosa. Y luego, por supuesto, algo de verde, para desengrasar. «Las ensaladas exóticas son mis preferidas», afirma. Lorena es una chica de pocos «peros», ni si quiera en la comida. «No hay nada que no me guste, ni siquiera una especia que deteste. Me encanta todo, además en verano se disfruta más. Qué rico sabe cualquier cosa fría con estas temperaturas: un gazpacho, batidos de frutas frescas o verduras, los helados... Ah y una buena paella, que se note que soy de Alicante», dice orgullosa la modelo que se convirtió en Miss España en 2001.
Sus raíces holandesas también le tiran mucho a la hora de pensar en sus platos favoritos. «En Holanda, mis padres me preparaban unas comidas riquísimas. Por ejemplo, recuerdo con especial cariño el solomillo con crema de cacahuete, un plato que allí se llama saté, y los batidos de leche holandesa con fruta cada mañana», dice con añoranza. Lorena descubre a LA RAZÓN que una de sus tácticas para ligar es a través de la gastronomía. «Dicen que una de las mejores maneras para enamorar a un hombre es por el estómago, así que...», bromea. «Pero vamos, que en buenos restaurantes seguro que también consigues conquistarlos», dice.
Mi restaurante favorito: «Imprescincible el Café Saigón, en la calle María de Molina de Madrid. Mi plato favorito... los tallarines de marisco al estilo thai, aunque es difícil decidirse».
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