Afectados por el accidente ferroviario estudian demandar a ADIF

Un grupo de afectados por el accidente de ferrocarril que el pasado miércoles se produjo en Arahal (Sevilla) estudia presentar una demanda conjunta con el fin de reclamar al ADIF –el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias es una entidad pública empresarial dependiente del Ministerio de Fomento– daños como responsable patrimonial de las instalaciones en las que viajan cuando sucedieron los hechos.

Así lo anunciaron ayer desde el bufete sevillano Osuna, que está recopilando las demandas de esos afectados, con el propósito de aclarar «la decisión de abrir la vía a pesar del estado de la misma fruto de las malas condiciones climáticas que convirtieron el terreno en un barrizal».

Para el mencionado bufete de abogados, «nunca se debió acordar que el tren marchase por la vía en las pésimas condiciones en las que se hallaba o, de hacerlo, habría que llevar una velocidad muy reducida, pero ninguna de las medidas se adoptó».

Entiende además el despacho que la lluvia caída en la zona del descarrilamiento no libra a la Administración de una posible responsabilidad. De hecho, sostiene que «esto fue lo ocurrido en Écija en las inundaciones de 2010, que, a pesar de haber un fenómeno atmosférico grande, se condenó por la Justicia al ayuntamiento y a la Junta por no tener el cauce el arroyo en buenas condiciones».

Por ello, los afectados estudian las posibles responsabilidades en vía administrativa por mal funcionamiento de la Administración que puedan derivarse del siniestro, «es decir, por una acción judicial no penal, la cual llevaría a un contencioso administrativo».

La empresa aludida, ADIF, tiene previsto abrir hoy al tráfico para que pueda reanudarse la circulación la vía afectada por la crecida del río Guadaira el pasado miércoles en Arahal, según aseveró ayer la entidad a través de un comunicado.