París

El paisaje se hace moderno en el Museo Carmen Thyssen

Cuarenta obras de la colección de la baronesa muestran el camino del impresionismo a las vanguardias

El paisaje se hace moderno en el Museo Carmen Thyssen
El paisaje se hace moderno en el Museo Carmen Thyssenlarazon

Cuarenta obras de la colección de la baronesa muestran el camino del impresionismo a las vanguardias

A finales del siglo XIX, la pintura salió de los estudios para llegar a los espacios urbanos y, con posterioridad, instalarse en los campos, montañas y playas para dar rienda suelta a la mirada de los artistas del momento. Antes de que los ingleses y franceses colocaran el caballete en tierra, los gustos por el paisaje y su trascendencia estética habían sido asumidos por el Romanticismo como una de sus principales fuentes de inspiración. Ya no era sólo un fuerte oleaje frente a las rocas, sino una respuesta a un estado de ánimo.

Sobre este asunto trata la exposición que el viernes se inaugura en el Museo Carmen Thyssen de Málaga bajo el título «Courbet, Van Gogh, Manet, Léger. Del paisaje naturalista a las vanguardias en la Colección Carmen Thyssen», que cuenta con la colaboración de la «Obra Social de La Caixa». En las paredes del Palacio de Villalón estarán expuestos hasta el 20 de abril del año que viene 40 cuadros, ofreciendo una visión de un periodo artístico dotado de una gran libertad tanto técnica como personal, que también permitió que zonas hasta entonces fuera de los ámbitos turísticos como Normandía y la Provenza se convirtieran en la Meca de quienes buscaban aire puro para su producción, mientras que se miraba y plasmaba de una manera distinta y por primera vez París.

La exposición, dividida en cinco partes diferenciadas, quiere poner de relieve el papel de la pintura de paisaje en la creación del arte moderno, a través de una mayor libertad de ejecución y contacto directo con la naturaleza. Además, se analiza el nexo de unión de artistas españoles como Martín Rico, Meifrén o Rusiñol, entre otros, con las principales tendencias del arte internacional como Friedrich, Courbet, Van Gogh o Monet. La obra clave de esta selección, en la imagen, es «Marea baja en Varengeville» (1882), de Monet, ya que ofrece una visión clara del impresionismo, la tendencia que cambió la manera de ver y entender las cosas, las personas y la naturaleza. También le acompaña «La iglesia de Chatou» (1909), de Derain, que representa el regreso a su tierra natal, tras un tiempo en el sur. Una obra que enlaza con «El puente» (1923) de Léger, que ya ofrece trazos de las vanguardias. Éstas tres piezas, junto a otras, han sido las elegidas para anunciar la exposición en las calles malagueñas durante esta semana.