Esperanza Oña: «Susana Díaz cuenta cosas en Madrid que luego aquí no hace. Es una transformista»

La diputada del PP-A y vicepresidenta del Parlamento lamenta la actitud «antidemocrática» de PSOE y C’s, que vetan las propuestas de los partidos de la oposición

–¿Cómo está siendo el cambio tras pasar 24 años por la Alcaldía?

–Las urnas no me han echado de la Alcaldía pero ante la ley de incompatibilidades y después de 24 años decidí dar un cambio. A pesar de eso he sentido durante meses mucha lentitud. Me daba remordimientos tener espacios de no hacer nada porque en una Alcaldía no hay espacios para no hacer nada. Eso debe de venir del estrés acumulado. El cambio es difícil, todo va a un ritmo más lento.

–¿Está cómoda en su nueva tarea? Hay quien reclama más responsabilidad para Esperanza Oña en el partido

–Estoy cómoda. Yo le pedí a Juanma Moreno estar presente en la Mesa del Parlamento –también lo pedí en la legislatura anterior– porque creo que debe haber representantes del PP capaces de enfrentarse a situaciones polémicas, conflictivas e injustas. La Mesa del Parlamento se ha convertido, lo digo entre comillas, en un campo de batalla. Es donde se deciden qué iniciativas se van a debatir y no se hace en función del Reglamento sino según los deseos del PSOE y Ciudadanos como hemos visto en dos reuniones ya.

–Con cierta perspectiva, ¿el PP hizo todo lo posible para que el PSOE no presidiera el Parlamento? ¿No habría que haber buscado un acuerdo con el resto de Grupos?

– El error es que el PSOE actúe así. Nosotros partimos de una distribución totalmente democrática. El PSOE fue el más votado, debía tener más representación y por qué no iba a presidir el Parlamento. Lo que no puede ser es que se crea el «shériff del pueblo». Hay un reglamento y un Estatuto de Autonomía por el que nos tenemos que regir y no por el capricho y la voluntad partidaria. Lo que el PP no acepta es que en el Pleno donde se eligió la Mesa nosotros teníamos dos y el presidente en aquel momento –Luis Pizarro– decidió que uno de los nuestros desaparece y se lo otorga a otro grupo. Lo perverso es que el PSOE no tenga límites

–Pero esa opción con una sobrerrepresentación del PSOE era previsible...

–No íbamos a conseguir otra cosa. El PSOE iba a presidir la Mesa, pero el problema es que no está siendo democrático.

–¿Y cómo se actúa contra un partido que dice usted que no es democrático?

–Que en democracia tengas que enfrentarte a situaciones no democráticas que se reiteran deliberadamente con la pretensión de que no se debata una ley del PP que lo que pretende es que en Andalucía, como ocurre en el resto de comunidades, no se pague el impuesto de sucesiones, debería ser tremendamente anómala. Desde el año 2000 que estoy en el Parlamento no se había producido nada como ahora. Esto no es normal. Tenemos que insistir, pedir informes jurídicos, tener paciencia y, finalmente, acudir a los tribunales.

–El TC ya se ha pronunciado antes y lo ha hecho de forma clara en situaciones similares. ¿Ya es el momento de interponer el recurso?

–Nuestro presidente apeló el lunes al consenso. Si seguimos de esta forma tendremos que iniciar esta vía aunque nunca es agradable. Que en plena democracia un partido tenga que ir al TC para que diga lo que todo el mundo sabe que va a decir y que el PSOE y el presidente de la Cámara sabe... Es tremendo que el presidente del Parlamento actúe más como secretario general del PSOE de Córdoba que como un cargo institucional y aséptico.

–¿Debería renunciar a su cargo como han reclamado desde Podemos?

–No queda bien que sea secretario general del PSOE en Córdoba y presidente del Parlamento, que es una institución de todos los andaluces. Es una cuestión de estética y de ética.

–¿Y el delegado del Gobierno en Andalucía puede liderar el PP de Cádiz?

–No es lo mismo. Él representa al Gobierno de España pero no preside una institución que debe ser aséptica. Cuenta las cosas del Gobierno y acompaña a sus miembros en Andalucía, pero no tiene una capacidad de decisión tan clara. Pero el presidente del Parlamento puede impedir que se debata una ley y tiene una capacidad de decisión sobre todos los andaluces.

–¿Cómo explica el papel de Ciudadanos aliándose con el PSOE en esta polémica?

– Es tremendo. El 80 por ciento de los votos de Ciudadanos proceden del PP y sus cargos públicos provienen del PSOE. Sería muy bueno que la sociedad se enterase de que no hay sintonía entre los votantes de Ciudadanos y sus representantes.

–¿Usted cree que Ciudadanos entrará en el Gobierno de la Junta o espera a un posible pacto a nivel nacional con Pedro Sánchez?

–No le encuentro mucha explicación a lo de Ciudadanos excepto que al igual que ocurrió con la comisión de investigación no apoya la nuestra para hacer una idéntica y luego la suya la apruebe el PSOE. Ahora presumen de que la comisión de formación es gracias a ellos cuando todos sabemos que no es verdad. Ahora va a pasar exactamente igual: nosotros presentamos una propuesta para la eliminación del impuesto de sucesiones y donaciones, Ciudadanos impide con el PSOE que se tramite y eso provocará que ellos presenten la misma propuesta y entonces esa sí se tramite. ¿Esa alianza tan baja democráticamente hablando qué contrapartida va a suponer? Puede ser que entren en el Gobierno de la Junta para que Susana Díaz se asegure la estabilidad o bien que estén mirando a determinados ayuntamientos o que después de las elecciones generales tenga vía libre para poder pactar porque ha hecho méritos.

–Ha conocido los gobiernos del PSOE en Andalucía con el PA y con IU. ¿Considera que C’s se está comportando como el socio más cómodo para los socialistas de la historia autonómica?

– Tal vez el PA era más o menos igual. Ellos tenían su recompensa con alguna consejería y estaban a gusto. Pero lo de Ciudadanos, para electorado que lo ha puesto ahí, debe ser muy sorprendente. Están abducidos por el PSOE y es incomprensible.

– ¿Y eso no es un déficit del PP, que deja escapar a votantes hacia un partido que acaba pactando con el PSOE?

–Rajoy ha tomado medidas impopulares que nos ha costado esfuerzo aceptar y estamos pagando una factura por ello. Ciudadanos no lo está haciendo porque no tiene mochila, pero empieza a tenerla ahora, y muy pesada. Deberá explicar por qué boicotea que los andaluces que no paguen el impuesto de sucesiones. Ciudadanos venía libre de mochila y la gente, enfadada con el PP, se marchó a una opción que considera que es similar y la sorpresa es que esa opción ha resultado ser una pegatina del PSOE.

– Tras la pérdida de las elecciones autonómicas con un mal resultado, ¿considera que los cambios de la dirección regional han sido suficientes? ¿No hay aún demasiado continuismo?

–Creo que no. Juanma Moreno sí ha tomado decisiones: el diputado de proximidad, haciendo que todos nos reunamos con más colectivos y demos cuentas de ello; haciendo iniciativas parlamentarias surgidas de esas reuniones... Está intentando acercar muchísimo el partido hacia la ciudadanía. Espero que con el tiempo podamos apreciar esos resultados.

–Con respecto a las elecciones generales, ¿el PP está en disposición de ganar?

–Estamos en un ambiente muy enrarecido que se va mejorando. Todos queremos tener mejores oportunidades de empleo y mejores salarios. En España se está creando empleo y es el país que más crece de Europa. Poco a poco a medida que los ciudadanos vayamos notándolo se irán suavizando las reacciones. Pero es verdad que esto no se ha conseguido del todo. Nos enfrentamos a un panorama político muy distorsionado con mucho voto de protesta y de queja. En España la gente vota a la contra y no a favor de. Hay gente que vota a Podemos porque está en contra de lo establecido. Creo que en las generales la gente va a valorar que estamos creciendo, que este Gobierno ha conseguido que España no sea rescatada y que estamos siendo un país ejemplar en el exterior.

–El PP también ha sido lastrado por los casos de corrupción porque ha dañado su propia seña de identidad como «partido limpio». ¿Esto se ha pagado ya?

–La gente tiene todo el derecho a estar descontenta con los casos de corrupción de todos los partidos políticos. Yo también lo estoy, pero a mí me preocupan mucho más que existan en el PP que es donde milito. El PP es el que más ha reaccionado contra la corrupción y el que más ha legislado contra ella y eso es otro hecho innegable. Es despreciable que haya personas que vaya a la política a enriquecerse y me parece normal que los ciudadanos condenen esto con rotundidad.

– ¿Y cree que el nivel de beligerancia contra el PP ha bajado?

– No. Hay algunas televisiones que su razón de ser es el PP. Meterse con el PP es la musa de su inspiración. Hay canales que no existirían o tendrían que replantearse su programación porque todos los días tienen como objetivo de sus ataques al PP.

–¿No cree que el PP ha reaccionado tarde en esta batalla a la que alude? Los cambios de Rajoy se han hecho esperar demasiado

–Sí, seguro. Lo que se ha hecho se podía haber hecho antes. Las decisiones que se han tomado se podían haber tomado antes y todos queríamos que así hubiera sido. Lo cierto es que están tomadas y a mí y a mucha gente que vota al PP nos hubiera gustado que se hubieran hecho con antelación aunque también es verdad que los toros se ven muy fáciles desde la barrera.

–¿Rajoy es el mejor candidato?

–Es nuestro candidato, es el presidente del Gobierno, es el que ha sacado a España de la crisis, el que está haciendo que España sea un país respetado fuera de nuestras fronteras y es el que ha conseguido que los españoles no tengan una vida tan desastrosa como la que hubieran tenido si hubiéramos seguido con las políticas del PSOE. Hay personas que lo encuentran muy gastado, pero es que tomar las decisiones que ha tomado es muy difícil.

–¿Es partidaria de una gran coalición del PP con el PSOE o prefiere dejarlo en manos de Podemos y de IU?

–Sin duda. El PSOE no quiere por nada del mundo un pacto con el PP. A nosotros no nos encanta pero podríamos planteárnoslo.

–¿Le parece apropiado que las primeras medidas en aflojar el cinturón por los funcionarios?

–Está bien porque fueron los primeros en sufrir las medidas de austeridad.

–Pero el ajuste del sector privado ha sido mayor que el del sector público...

–Pero el presidente del Gobierno puede tomar decisiones inmediatas sobre el sector público. Las consecuencias sobre el sector privado son más lentas. Creo que se está haciendo bien.

–¿Le preocupa la situación de Cataluña?

–Sí. Es la consecuencia de muchos años. Todos los Gobiernos han sido muy permisivos con todos los atrevimientos separatistas y no se deberían haber permitido. La Constitución señala que España es un país indisoluble y que la soberanía reside en el pueblo español, no en el catalán. No es normal que en Cataluña no se pueda estudiar en castellano. El nacionalismo es insaciable, voraz de forma obsesiva. Se quiere separar de España. No hay que darle ni más ni menos, que se trate a Cataluña igual que a los extremeños o a los murcianos.

–Con respecto a Susana Díaz, ¿no cree que ha sufrido poco desgaste desde que gobierna?

–Es digno de estudio sociológico. Deberíamos invertir en eso. Todo el mundo te dice que el PSOE tiene Andalucía paralizada y que hace falta un cambio pero, sin embargo, cuando les preguntas a quién van a votar en las elecciones te responden que al PSOE. Es un partido al que la gente vota sin convencimiento ni ilusión.

–¿No cree que ese liderazgo nacional que cultiva en su partido le viene bien?

–Tiene clara sus ambiciones. Es evidente que no se lleva bien con su secretario general y que lo quiere quitar para ponerse ella. En Madrid cuenta cosas y da unos discursos que yo suscribo pero es que luego en Andalucía no lo hace. Su discurso en Madrid lo podría dar cualquier político del PP. Es una transformista política. En Madrid se pone otro traje.