Déficit autonómico
La Junta encadena dos años cumpliendo el déficit tras rebasarlo durante seis
El Ministerio de Hacienda sí avala esta vez los datos enviados por el Ejecutivo andaluz
Esta vez no ha habido sorpresas con el objetivo de déficit. La presidenta de la Junta, Susana Díaz, avanzó el pasado 15 de febrero en el transcurso de un Pleno en la Cámara autonómica que la comunidad se había ajustado a los requerimientos del Gobierno al cerrar el ejercicio de 2017 con un déficit del 0,31 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), por debajo del objetivo del 0,6 por ciento. El dato era provisional porque estaba pendiente de la revisión por parte de la Intervención General del Estado. En más de una ocasión la Junta se ha adelantado a señalar una cifra de cumplimiento que una vez revisada por el Gobierno ha superado los límites establecidos. Hay que señalar en este sentido que la Junta ha incumplido el objetivo de déficit durante buena parte de la crisis económica. El presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía, Antonio López, recordó en una reciente intervención que el Ejecutivo regional se ajustó al objetivo de déficit en 2016, pero que llevaba sin conseguirlo desde el 2009. Ciertamente, la Junta sí lo cumplió a medias en 2013 porque el Ministerio de Hacienda diseñó unos objetivos asimétricos, cuestión que fue muy criticada por otras regiones. Esto es, el Gobierno permitió un límite más alto –concretamente el 1,58 por ciento– para aquellas comunidades como Andalucía que tenían más dificultades económicas. El café para todos no ha vuelto a repetirse.
En esta ocasión el cumplimiento no admite matices. El Ministerio de Hacienda, según los datos que proporcionó ayer, avaló que la comunidad ha registrado un déficit del 0,22 por ciento, lo que equivale a 335 millones de euros. La región se sitúa así por debajo de la media de las comunidades, con un déficit de 3.703 millones de euros en total: el 0,32 por ciento del PIB.
El cumplimiento le ha dado alas a la Consejería de Hacienda en mitad del debate sobre la reforma del modelo de financiación y la presunta mala ejecución del mismo que la Junta cifra en una merma de más de 5.000 millones de euros en transferencias desde 2009. «Montoro –adujo la consejera de Hacienda– tiene a las comunidades autónomas con el pie en el cuello».
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