La recaudación por la tasa de Sucesiones y Donaciones cae un 11% respecto a 2017

La reforma del impuesto ya se siente en los ingresos, con una caída en marzo del 40% tras aumentar en febrero un 17,7%

El «efecto Ciudadanos» ya se deja notar en la recaudación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, tras la reforma auspiciada por la formación naranja para la investidura de Susana Díaz, primero, y las posterior aprobación de las cuentas autonómicas. Hasta febrero, se ingresó por esta tasa casi 44 millones, un 17,7% más que en el mismo período del pasado ejercicio. No ha sido hasta marzo (último dato publicado por la Consejería de Hacienda) cuando se ha cuantificado el descenso en la recaudación, pasando de los 73,7 millones de 2017 a los 65,5 millones de 2018, una caída del 11%. El descenso viene provocado por la reducción del 40% de los ingresos por estas tasas en marzo (de 36,3 millones a 21,5). El mayor impacto de la reforma se notará previsiblemente en la segunda mitad del año, ya que los herederos cuentan con seis meses para hacer efectivo el pago del tributo desde el momento del fallecimiento. Desde la Consejería de Hacienda apuntaron a este diario que es habitual que el plazo se apure hasta el final. Esto es, en los seis primeros meses de este año, aún se están computando herencias bajo el criterio anterior al 1 de enero. Por provincias, en Almería la recaudación bajó en marzo un 50% y en relación al acumulado del año, un 13,86%. En Cádiz, la bajada mensual fue del 5,49% y la acumulada del 27%. En Córdoba, del 20,5% y del 31,47%, respectivamente. El descenso mensual de Granada fue del 14,3% y el acumulado, del 12%. En Huelva fue del 66,19% en el mes y del 17% en el total del ejercicio. En Jaén, del 52,94% en marzo y del 34,94% en el acumulado. La caída mensual de Málaga fue del 48,98% y la total del 26%. Finalmente, en Sevilla la reducción de ingresos por este impuesto cayó un 50,79% en el mes y ha aumentado un 6,18% en el acumulado del año.

El 1 de enero entró en vigor el acuerdo que en septiembre suscribieron PSOE y Cs. La parte central de la reforma es la exención fiscal para las herencias de hasta un millón, siempre que los beneficiarios sean parientes directos y el patrimonio preexistente se encuentre también por debajo del millón. Se corrigió el error de salto, se introdujeron bonificaciones por discapacidad y se redujo un 99% el pago de donaciones de hasta un millón si se destina a un negocio. El PP-A acusó tanto a Susana Díaz como a Juan Marín de protagonizar un «engaño masivo», al considerar que el impuesto en 2018 «va a estar más vivo que nunca». Los Presupuestos, según los populares, en la partida de ingresos prevén recaudar 380 millones por esta tasa, 47 menos que en 2017. Andalucía lideró la rebaja en el impuesto de sucesiones, según el Registro de Economistas Asesores Fiscales, cuyo estudio, no obstante, precisa que la andaluza «sigue siendo la región donde más se paga» en el supuesto de un hijo de 30 años que recibe de su padre 800.000 euros en efectivo sin destino específico y sin discapacidad.