La «vida cotidiana» de Nueva York a través de los dibujos de Sorolla

El Museo Carmen Thyssen de Málaga presenta una muestra «única» de «gouaches» del pintor valenciano.

Satisfacción por el trabajo hecho y expectación por comprobar cómo será acogia esta nueva apuesta expositiva eran los sentimientos que mejor se percibían ayer en el Museo Carmen Thyssen de Málaga. La pinacoteca inauguró ayer la muestra temporal «Sorolla. Apuntes de Nueva York», en la que se recoge un conjunto de «gouaches» o pinturas y dibujos de estampas neoyorquinas del pintor valenciano. Se trata de una de las facetas menos conocidas del artista valenciano, con influencias fotográficas. Y eso que Sorolla se volcó con esta técnica, como demuestra un reciente estudio en el que dos investigadores aseguran que utilizó hasta veinte pigmentos diferentes en los bocetos de «Visión de España».

En este caso, la exposición recoge hasta el próximo 8 de enero, nueve «gouaches»y 18 dibujos, así como material documental y gráfico relacionados con el viaje que realizó Joaquín Sorolla a Nueva York en 1911. El artista viajó por primera vez a la ciudad en 1909 –repitió dos años más tarde– y se alojó en el hotel Savoy junto a su esposa, Clotilde, y sus hijos, Joaquín y María –abuela de Blanca Pons, presente en la inauguración, junto a Carmen Cervera y el alcalde, Francisco de la Torre, entre otros–.

Precisamente, Pons destacó que la exposición «sorprende porque es única», posee «una calidad excepcional» y pone de relieve a un creador «supermoderno».

Las obras dque se exponen en el Museo Carmen Thyssen de Málaga son fruto del trabajo realizado durante su estancia en el hotel Savoy de Nueva York, en la que se siente fascinado por la vida en la ciudad y que plasma en una serie de «gouaches» sobre la vida cotidiana sobre el cruce de la Quinta Avenida y la calle 59, la Gran Army Plaza y algunas vistas panorámicas de Central Park.

La muestra ha sido presentada este lunes por la presidenta de la Fundación Palacio Villalón, Carmen Cervera, junto al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y con la presencia de la concejala de Cultura del Ayuntamiento de la capital, Gemma del Corral; la directora del Museo Sorolla, Consuelo Luca de Tena; la bisnieta del autor y patrona de dicho museo, Blanca Pons Sorolla; la directora artística de la pinacoteca y comisaria de la muestra, Lourdes Moreno, y el patrocinador de la muestra y abogado, Ramón Gómez Villares.

“Adoro las acuarelas de Sorolla”, ha indicado Carmen Cervera, de las que ha dicho que “siempre aprendemos cosas”. Además, ha agradecido al regidor malagueño su labor en pro de los museos de la capital: “Es la primera piedra de todo”, ha añadido.

De la Torre, por su parte, ha señalado que dicha muestra ha sido expuesta en Múnich “con éxito excepcional”, y ha explicado que el pintor captaba “la vida cotidiana de Nueva York”. También ha destacado la colaboración privada del bufete Gómez & Villares Abogados, añadiendo que éste es “un buen camino para fortalecer” al museo.

Asimismo, la directora del Museo Sorolla ha indicado que la exposición muestra a “un Sorolla poco conocido”, que “apenas ha estado expuesto”. De este modo, ha añadido que se trata de “una producción muy excepcional porque nunca volvió a hacer nada parecido”.

En este sentido, la directora artística de la pinacoteca ha apuntado que en la muestra se puede encontrar a “un pintor distinto al que estamos acostumbrados a ver”. “Son obras mucho más espontáneas, con una gama cromática especial”, ha explicado, agregando que usa técnicas como el picado, ya que pintaba desde su habitación del hotel, por lo que ha señalado que se trata de la faceta del pintor “más fotográfica”.

Por último, Blanca Pons Sorolla ha destacado que la exposición “sorprende porque es única”, además ha dicho que posee “una calidad excepcional” y que muestra a un pintor “supermoderno”. “Tenerlo en una ciudad tan cosmopolita como Málaga es un gusto”, ha reconocido.

Estas obras del pintor valenciano son fruto del trabajo realizado durante su estancia en el hotel Savoy de Nueva York, en la que se siente fascinado por la vida en la ciudad. Una atmósfera que plasma en una serie de ‘gouaches’ sobre la vida cotidiana sobre el cruce de la Quinta Avenida y la calle 59, la Gran Army Plaza y algunas vistas panorámicas de Central Park.

Las obras fueron pintadas sobre cartón o papel y revelan “al artista más íntimo”, así como la influencia de la fotografía en su obra, con vistas en picado, encuadres casuales y planos fragmentados. Además, se puede descubrir el interés de Sorolla por los nocturnos y el paisaje urbano, facetas prácticamente inéditas en la producción del pintor.

En cuanto a los dibujos, gracias al apoyo de su mecenas, el millonario e hispanista Archer Milton Huntington, fundador de la Hispanic Society of America. Sorolla presenta sus obras en varias exposiciones antológicas en museos norteamericanos en 1909 y 1911.

Durante sus momentos de descanso en el segundo de estos viajes, el artista se entretiene realizando rápidos dibujos en los reversos de los menús de los restaurantes. La exposición recoge algunos de los que representan a los comensales del hotel Savoy, en Nueva York, así como los primeros esbozos de la que será su obra maestra: ‘Visión de España’, 14 lienzos para la decoración de la biblioteca de la sociedad encargados por Huntington.

La muestra ‘Sorolla. Apuntes de Nueva York’, patrocinada por el bufete Gómez & Villares Abogados, presenta a un Sorolla distinto, pero “sin dejar atrás su esencia”, según Lourdes Moreno.m