Política

«Le he pedido una reunión a la Junta y no han contestado»

El alcalde de Marinaleda confía en que la convoquen para dejar. claro que no quiere la compra del Humoso sino la cesión.

El diputado andaluz de IU Juan Manuel Sánchez Gordillo
El diputado andaluz de IU Juan Manuel Sánchez Gordillolarazon

El alcalde de Marinaleda confía en que la convoquen para dejar

claro que no quiere la compra del Humoso sino la cesión.

El mediático alcalde del municipio sevillano de Marinaleda y ex parlamentario andaluz de IULV-CA, Juan Manuel Sánchez Gordillo, se ha echado encima de nuevo una carga pesada: el futuro de las tierras del Humoso, expropiadas hace décadas al Duque del Infantado y que ahora el Gobierno andaluz, su propietario, quiere vender.

El también dirigente del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT, antes SOC), adelantó hace unos días a LA RAZÓN su intención de ponerse en huelga de hambre «hasta la muerte» si era necesario para impedir que la finca «se escriture a nombre de nadie». Lo hizo tras repasar la historia de surcos en el barro y en los rostros de los jornaleros que pelearon por ellas hasta que se las cedieron y convirtieron sus frutos en el petróleo de la economía local. Luego, el PSOE, su portavoz en el Ayuntamiento de Marinaleda, Mariano Pradas, le instó, también a través de este periódico, a que «en lugar de amenazar con una huelga de hambre», promoviera una reunión entre las dos administraciones, la local y la autonómica, en la que estuvieran presentes los cooperativistas –han creado la cooperativa Humar, en la que se manipulan los cultivos de la finca para luego comercializarlos– con el fin de «discutir qué hacer con las tierras». «Menos amenazas y más negociación», condensó el socialista, para añadir que Sánchez Gordillo era consciente de que el día de la enajenación de los terrenos «iba a llegar» porque no son del Ayuntamiento. Ahora el alcalde desvela que ya ha solicitado un encuentro con la Junta, en concreto con la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural que capitanea Carmen Ortiz, pero ésta, de momento, «no ha contestado», «no han dicho nada», asevera, aunque confía en que el Ejecutivo regional rompa el silencio y convoque el encuentro. Lo que tiene claro es la postura que defenderá en él: «No queremos comprar las tierras del Humoso sino que nos garanticen la cesión del uso que hasta ahora estamos haciendo por un tiempo indeterminado», avanza. Intuye que su discurso confrontará con el de su interlocutor, dado que «el Gobierno andaluz está empeñado en vender la finca a los cooperativistas y uno a uno para que no haya jaleo con la propiedad colectiva», sostiene. «O si no», apostilla, «la sacarán a subasta». «Pretenden, tan de izquierdas como son, que lo que hoy son tierras de todo un pueblo, pase a ser una tierra para unos pocos», remata, subiendo la gradación de los decibelios de ironía. De que logren o no llegar a un acuerdo dependerá en buena medida el futuro de un municipio de más de 2.600 habitantes que además, según fuentes municipales, «tiene una deuda con la Junta». Continuará.