Montero se estrena de candidata de un PSOE con «E de España»

La ministra encabeza la lista al Congreso por Sevilla, donde participa en un acto en Utrera y arremete con quienes «se atreven» a llamarles inconstitucionalistas

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, se estrenó ayer en la precampaña electoral como cabeza de lista al Congreso por Sevilla –impuesta por Ferraz en contra de lo que votó la militancia– con un acto en Utrera al que asistió la secretaria del PSOE sevillano, Verónica Pérez, y el número dos de la lista y hasta hace poco delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, además de varios regidores de la provincia. Mientras, la líder de los socialistas andaluces, Susana Díaz, participó en un acto con las Juventudes Socialistas en Granada si bien hoy estará con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto en Málaga.

Ambas llamaron a movilizarse, convencidas de que «nuestro enemigo no es la derecha sino la abstención», en palabras de Montero, para quien en Andalucía «no hemos gobernado porque hay gente que se quedó en su casa». La «espinita del 2D», como la definió Díaz, que aseguró que «nos vamos a sacar pronto».

Díaz salió de nuevo al paso, a preguntas de los periodistas, de las informaciones que apuntan a que la federación andaluza –la más numerosa del PSOE y hasta ahora granero de votos sin el que ningún socialista ha llegado a la Moncloa– estaría planeando una suerte de escisión a modo del PSC. «El PSOE de Andalucía es el tronco del PSOE de España, lo ha sido, lo es y lo va a seguir siendo», dijo tajante, al tiempo que dejó claro que los socialistas andaluces llevan semanas con una «presencia constante en todo el territorio» para pedir el voto para el PSOE en las generales y municipales.

Unas elecciones «condicionan» las otras, advirtió Montero para evitar tentaciones de los munícipes andaluces más próximos a Díaz de desmarcarse de la campaña del 28A, ante el temor de que un mal resultado les contagie el 28M si el electorado pasa factura a Sánchez por su acercamiento a los independentistas, en el que está basando la campaña la derecha. Montero contrarrestó ese mensaje criticando que «se atrevan a decir que el PSOE es inconstitucionalista cuando es el único partido que lleva la E de España en sus siglas».