Junta de Andalucía

Podemos insiste en equiparar el 4D con el desafío secesionista catalán

La Junta lamenta la «grotesca» comparación y pide «respeto»

El portavoz de la Junta, Juan Carlos Blanco
El portavoz de la Junta, Juan Carlos Blancolarazon

Pablo Iglesias marcó el camino y Podemos mantiene el discurso en Andalucía, pese al rechazo generalizado a la teoría que planteó el líder de la formación morada: que existen similitudes entre las manifestaciones del 4 de Diciembre de 1977 y la reclamación actual de los ciudadanos catalanes que solicitan la indenpendencia de España.

El discurso de Iglesias no es nuevo. Lo esbozó en un debate electoral en Atresmedia en diciembre de 2015 cuando afirmó que «en el año 1977, Andalucía decidió, que como Andalucía, querían estar en España. Eso es un ejemplo para nosotros frente al inmovilismo». Ya entonces lo usó como ejemplo para defender que es posible autorizar un referéndum pactado en Cataluña que dirima la posibilidad de independencia o no. Ahora ha retomado ese argumento, que Podemos en Andalucía hace propio.

En este sentido, el portavoz del Gobierno andaluz, Juan Carlos Blanco, arremetió ayer contra Iglesias por utilizar de coartada la manifestación del 4 de diciembre para legitimar el «separatismo catalán». «Se trata de un disparate ofensivo y grotesco», dijo.

El portavoz del Ejecutivo de Susana Díaz pidió «explicaciones a Iglesias» y lamentó que trate de «reescribir la historia» con la única intención de que alguien «pique el anzuelo».

El 4 de Diciembre de 1977, Andalucía reclamó en la calle el acceso a la autonomía plena en las mismas condiciones que las denominadas comunidades históricas, que eran –y son–, Cataluña, País Vasco y Galicia.

Tras las declaraciones de Blanco al término del Consejo de Gobierno, Podemos Andalucía insistió en su visión del proceso autonómico andaluz. En un comunicado acusó al PSOE-A y al Gobierno andaluz de «despreciar» la historia de Andalucía y su autonomía y advirtió de que los socialistas andaluces «se reafirman en que no quieren una solución» para el conflicto catalán.

El secretario de Comunicación, Pablo Pérez Ganfornina, insistió en que «hubo que cambiar la ley para que se hiciera realidad el 28F, esa es la historia del pueblo andaluz». «La ley tuvo que servir a la democracia y no al revés», dijo.

El referéndum del 28 de Febrero de 1980 no se superó en Almería por las dificultades del censo, aunque ganó ampliamente el «sí». En cualquier caso, no era para «separarse» de España, sino para igualarse a otras regiones.