Sevilla se blinda ante la amenaza terrorista

Los atentados de Barcelona y Cambrils han obligado a reforzar las medidas de protección en las grandes ciudades. La junta local de seguridad de Sevilla, donde ya se habían colocado grandes maceteros junto a los enclaves turísticos y peatonales, aprobó ayer un plan que busca la activación de dispositivos «estables», como puntos de control permanentes en el centro, la instalación de sistemas de videovigilancia, el aumento de patrullas conjuntas entre las policías Nacional y Local y reuniones semanales de coordinación entre ambos cuerpos. Así lo anunciaron ayer el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, y el alcalde de la capital hispalense, Juan Espadas, acompañados por el subdelegado del Gobierno en la provincia, Ricardo Gil-Toresano, y el concejal delegado de Seguridad y Movilidad, Juan Carlos Cabrera.

De esta manera, se establecen varios niveles de perímetros de seguridad, con la instalación en la zona más céntrica de puntos de control de paso estables y mecanismos fijos de barrera que sólo permitan el paso de residentes, carga y descarga y servicios de emergencias, entre otros servicios públicos. Además, se acelerarán las reordenaciones de las calles Mateos Gago y Alemanes, mientras se analiza «in situ» el entorno de la Giralda, Torre del Oro, Puerta Jerez, San Jacinto, Sierpes, Tetuán o la plaza de la Encarnación, entre otros espacios. «Donde entienda que hay que tomar decisiones de restricción de tráfico por seguridad las voy a tomar», aseguró Espadas.

De otro lado, los dispositivos que se colocan en los grandes eventos quedarán establecidos de modo permanente, a lo que se sumará un servicio de videovigilancia y otras actuaciones especiales durante las fiestas de primavera, como iluminación y megafonía. Estas medidas, precisamente, se barajaron tras los sucesos de la Madrugada de este año.

El alcalde subrayó que el Ayuntamiento «no va a escatimar en recursos propios en la seguridad», anunciando una modificación presupuestaria para conseguir más efectivos policiales antes de final de año. En este marco, Espadas instó al Estado a flexibilizar los criterios que permiten aumentar la contratación de personal público para que ese incremento de policías pueda ser una realidad, ya que «está más que justificado». Sobre este extremo, Sanz se mostró «seguro» de que dará resultado el cauce de diálogo abierto entre el Ministerio de Interior y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que Hacienda articule los mecanismos necesarios, puesto que «todos somos conscientes de que se necesitan reforzar los medios».

Entre las medidas acordadas, Sanz también anunció la creación de una mesa técnica, con reuniones semanales, para «reaccionar de modo conjunto a situaciones cotidianas o a eventos que se desarrollen en la capital de Andalucía, intensificando además las patrullas y los controles conjuntos entre las Policías Nacional y Local».

Asimismo, mencionó la mejora de la formación de la Policía Local en la lucha antiterrorista, además de la seguridad privada y la ciudadana, con el objetivo en estos últimos casos de que sepan reaccionar si se produjera un atentado.

También se desarrollarán planes contra la radicalización, y también contra la islamofobia, un marco en el que Sanz valoró la incorporación del Ayuntamiento de Sevilla al plan de lucha contra la radicalización violenta, que «está dando tan buenos resultados de mano de la ciudadanía» para detectar potenciales terroristas. En ese ámbito, Sevilla «fue definida como experiencia piloto, pero la acción se desarrollará en su integridad».