Sevilla
Varias cofradías se quedan en sus templos y el tiempo amenaza «la Madrugá»
La lluvia deslució el ecuador de la Semana Santa, dejando en sus templos a varias cofradías de Cádiz, Huelva, Sevilla y Málaga, entre ellas el Cristo de la Exaltación que saca en su trono el presidente andaluz, Juanma Moreno, que finalmente no procesionó al igual que otras dos cofradías malagueñas por la lluvia. En Sevilla decidieron no hacer la estación de penitencia el Cristo de Burgos y Los Panaderos, que el año pasado sufrió un percance al caerse en la salida el olivo que lleva el paso del prendimiento de Jesús. El Carmen Doloroso hubo de refugiarse y La Sed, una de las de recorrido más largo que inició a media mañana, cambió el itinerario de vuelta y apretó el paso al arreciar la lluvia. El Miércoles Santo sevillano tuvo como espectador al ex presidente del Gobierno José María Aznar, que asistió a la salida de la hermandad del Baratillo en un balcón junto al ex ministro de Interior y candidato al Parlamento Europeo Juan Ignacio Zoido. Esta hermandad ha protagonizado esta Semana Santa una polémica por la denuncia del Grupo de Juristas 17 de marzo por el fajín del dictador Franco que viste la Virgen de la Caridad desde hace 20 años en su salida procesional. Denuncia que archivó la Fiscalía de Sevilla el lunes ante lo cual los denunciantes presentaron otra en el juzgado de guardia, que ha incoado diligencias previas. La cofradía en ningún momento se pensó cambiar el fajín de la Virgen, que regaló en el año 2000 a la hermandad la hija de Franco, y ha rechazado responder a la denuncia para no dar publicidad a los denunciantes. Por su parte, estos entienden «absolutamente desacertada» la decisión de la hermandad de que su titular procesionara con el fajín habiendo un auto judicial que ve indicios de que los hechos pueden ser constitutivos de delito así como por suponer una posible infracción administrativa por incumplir la Ley de Memoria Democrática. Desde el Gobierno andaluz, tanto Moreno como la consejera de Cultura, Patricia del Pozo –que ayer visitó las cofradías del Miércoles Santo en Córdoba– dijeron respetar la decisión de la hermandad y destacaron que no se han dictado medidas cautelares. Más allá de polémicas, los andaluces miran al cielo pendientes de que el tiempo frustre la jornada del Jueves Santo y «la Madrugá», impidiendo salir al Abuelo de Jaén, el Nazareno de Huelva o la Macarena y el Cristo de los Gitanos de Sevilla, con su nueva túnica bordada.
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