Literatura

Castilla y León

Beotas y Casquet resumen con maestría el primer cuarto de siglo de Matarromera

El texto es uno de los últimos trabajos del primero, el querido periodista y escritor abulense

Beotas y Casquet resumen con maestría el primer cuarto de siglo de Matarromera
Beotas y Casquet resumen con maestría el primer cuarto de siglo de Matarromeralarazon

El texto es uno de los últimos trabajos del primero, el querido periodista y escritor abulense

La fatalidad apareció cuando menos cabía esperarla. Enrique Beotas, periodista nacido en Ávila aunque indudablemente enlazado con Galicia, perdía la vida en el accidente del AVE de la curva de Angrois, el barrio de Santiago de Compostela que casi todos descubrimos en la víspera del patrón de España. La profesión periodística atendía, incrédula, las noticias que llegaban desde la capital gallega. Y en muchos casos, era su amigo y colaborador, el también periodista y escritor Sergio Casquet, el que, con enorme dolor contenido pero evidente, confirmaba la mala nueva. Ambos han trabajado, codo con codo, durante muchos años. Y, hasta ese momento, seguían haciéndolo. De su empeño personal surgieron series de entrevistas como la que durante dos temporadas pudieron degustar los lectores de LA RAZÓN en Castilla y León, «Castellanos y leoneses por derecho». Algo que también tuvo a su disposición el gran público de regiones vecinas, cuando llegaron a los quioscos las series «Galicia Sexta Provincia» y «Ser extremeño».

Beotas (Ávila, 1955-Santiago, 2013) no dejó de trabajar a lo largo de su vida. Recordado por muchos por su maestría al frente del decano de la radio sociosanitaria en España, «La Rebotica», era licenciado en Periodismo y Publicidad por la Complutense de Madrid. De su trazo salieron biografías como la de Fraga, y, junto con Sergio Casquet (Madrid, 1977) -traductor, entre otros de Conan Doyle y Philip Larkin-, escribió y editó «Llamazares. Apuntes íntimos», «Modesto Seara. La mirada universal», «Gerardo Fernández Albor. La elegancia del compromiso» y «Carlos Moro, las raíces de un sueño», sobre el presidente del Grupo Matarromera.

Precisamente con esa compañía afrontó Enrique Beotas uno de sus últimos trabajos periodísticos. Un libro titulado «Grupo Matarromera. 25 años de excelencia», que se presenta, este jueves 19, en el Monasterio Cisterciense de Santa María de Valbuena, en San Bernardo (Valladolid), en el acto conmemorativo de ese primer cuarto de siglo de la matriz de siete de las bodegas castellano y leonesas con más proyección en el mundo.

El texto, que consta de 160 páginas, publicado en un papel primera calidad, recorre la historia, antecedentes y retos de la firma de Carlos Moro. Se han editado 5.000 ejemplares, de los que 1.500 se han lanzado en inglés.

El libro

l Esta obra póstuma de Enrique Beotas, en la que también ha trabajado Sergio Casquet, aborda «los orígenes de un sueño», que el dueño de Matarromera remonta a hace 800 años, cuando llegaron a la Ribera del Duero sus antepasados.

l De igual manera, el texto ofrece al lector pistas de cómo ha ido logrando el Grupo vinícola expandirse por el mundo, con importante presencia en lugares como Estados Unidos.

l Los amantes del vino saben de la calidad de sus caldos. Las bodegas productoras de Matarromera en Castilla y León son Emina (San Bernardo), Valdelosfrailes (Cubillas de Santa Marta), Rento (Olivares de Duero) -de Ribera del Duero-, Cyan (Valdefinjas) -de Toro-, y Emina Rueda (Medina del Campo).

l En su ánimo diversificador, también cuenta con producción de cosméticos, aceite, vino sin alcohol o licores destilados.