Carlos Villar: «El futuro de Bodegas Protos no pasa por elaborar diez millones de botellas cada año»

Aunque Protos no para de crecer y cada vez se venden más y mejor sus vinos pese a la crisis, tanto en España como en los más de noventa países de todo el mundo donde están presentes, en lo personal no está siendo el mejor año para esta gran familia, que conforman los 56 trabajadores de la bodega. La pérdida de dos compañeros este 2012, uno por enfermedad, y otro, en plena vendimia, en un fatídico accidente laboral, han dejado huella, y un fuerte sentimiento de rabia e impotencia. El director general de Protos, Carlos Villar, no entiende este infortunio que está teniendo la bodega en los últimos años, pero mira hacia adelante con optimismo, convencido de que la empresa pone todo de su parte para garantizar la seguridad de sus empleados. Es más, han contratado recientemente a una técnico en prevención de riesgos para mejorar. Si bien, tiene claro que por muchas medidas se pongan en marcha, «la prevención -dice- debe partir primero de uno mismo».

Calidad a buen precio

Calidad por encima de la cantidad. Ése es el lema de la bodega. Y además, a un precio asequible para todos los bolsillos. Esta política es la que ha permitido a Protos, a pesar de la que lleva cayendo en España varios años, potenciar aún más su marca y fidelizar clientes en todo el mundo. «Lo que más valora el consumidor es poder beberse un buen vino a un precio lógico, y especialmente ahora, con esta crisis de consumo, en la que le gente tiene menos dinero y mucho miedo. De cara al futuro, tiene claro que Protos seguirá apostando por los vinos finos y elegantes que les caracterizan, «para su disfrute comiendo o en una reunión, y no para el sorbo de un momento en una cata», apunta. Mantendrán su esfuerzo en América, donde son de los que más venden, y harán especial hincapié en Europa. Y sin volverse locos, afirma que acomodarán su oferta a la demanda del mercado. «El futuro de Protos -dice- no pasa por vender diez millones de botellas al año sino por atender la demanda nacional e internacional.

El crianza de 2009 de Protos, un buen vino para brindar por un próspero año nuevo

Se acerca la Navidad. Un tiempo de celebraciones con la familia y con los amigos. Carlos Villar brindará este año con un Crianza de 2009. «Es una gran añada», dice, mientras recomienda a le gente que pruebe este vino durante estos días festivos «porque por calidad, precio y estructura es uno de los vinos que mejor representa a la Ribera del Duero». Elaborado con uva cien por cien tempranillo, el tiempo de espera para disfrutar de este caldo es de 26 meses:catorce de ellos en barrica de roble americano y francés, y otros doce en su propia botella. Destacan su espectacular color picota con ribete granate y su aroma a fruta madura.