Castilla y León, la última región de España en aprobar sus presupuestos

Más vale tarde que nunca, dice el sabio refranero popular. Algo que en Castilla y León se ha puesto de manifiesto con los presupuestos de este año, aprobados ayer tras dos intensos días de debate parlamentario en los que se han debatido más de dos mil enmiendas, de las que apenas se han aprobado algo más de medio centenar, el 3 por ciento.

Todas ellas de Ciudadanos (26, por valor de 2,2 millones de euros) y de los leonesistas de la UPL (31, por un importe cercano a los cuatro millones-, ya que el PP tumbó todas las propuestas que plantearon los socialistas (677), Podemos (660) e Izquierda unida (663). Unas cuentas que han sido las últimas de la España autonómica en salir adelante. Lo que ha provocado duras críticas por parte de la oposición, especialmente la de izquierdas, desde donde consideran que estos presupuestos son una «farsa» porque «no se van a ejecutar debido a que no habrá tiempo material para hacerlo».

La Cortes regionales han dado por tanto luz verde a los más de 10.200 millones de euros que contemplan estos presupuestos gracias a los 42 votos favorables del PP y a las previsibles abstenciones de Ciudadanos y de los leonesistas de la UPL. Aunque bien es cierto que durante parte de estos dos días de sesión plenaria se especuló con la posibilidad de que la formación naranja diera el «sí» a estas cuentas debido a los constantes guiños del PP aceptando muchas de las enmiendas parciales que presentaron. «Son las cuentas que necesita Castilla y León y las que consolidarán la creación de empleo», destacaba el presidente del PP autonómico, Alfonso Fernández Mañueco.

«Hoy (por ayer) no es un día para celebrar nada, porque estos presupuestos no son más que propaganda y autobombo y no servirán para nada», se quejaba el socialista Luis Tudanca, muy crítico también con Ciudadanos por respaldar con su abstención al PP, y a los que calificaba como «cómplices» de la corrupción de los populares.

Algo en lo que coincidían en Podemos, desde donde su líder, Pablo Fernández, atacaban también al partido naranja por haber posibilitado que no hubiera debate parlamentario al «precocinar» las cuentas con anterioridad junto al PP. En Ciudadanos, por su parte, el procurador Manuel Mitadiel, se felicitaba por haber sido útiles para mejorar la vida de la gente «frente al grito y la confrontación de otros».

Entre los aspectos destacados de estas cuentas, destacan los 220 millones de euros para ciencia y tecnología, o que se eleve hasta los 300.000 euros el mínimo exento del Impuesto de Sucesiones, lo que beneficiará a más de 1.300 ciudadanos. También las nuevas deducciones para rehabilitación de viviendas en el medio rural o que para los concursos de traslados de la Sanidad regional se convoquen todas las vacantes.