Valladolid

Decisivo paso de la Diputación de Valladolid para evitar el cierre de empresas en pueblos

Jesús Julio Carnero alcanza un acuerdo con los empresarios para poner en marcha un centro de apoyo a emprendedores

El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y la de la CVE, Ángela de Miguel, suscriben el acuerdo de colaboración
El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y la de la CVE, Ángela de Miguel, suscriben el acuerdo de colaboraciónlarazon

Decisivo paso de la Diputación de Valladolid para evitar el cierre de empresas en los pueblos al poner en marcha, de la mano de la Confederación Vallisoletana de Empresarios (CVE), el Centro de Transmisión Empresarial de la provincia. El objetivo es mantener proyectos viables y hacer frente a la lacra del desempleo en el medio rural. Así lo destacó el presidente de la institución provincial vallisoletana, Jesús Julio Carnero, tras suscribir un ambicioso acuerdo con la máxima responsable de la CVE, Ángela de Miguel.

Jesús Julio Carnero señaló que esta nueva iniciativa, que se enmarca dentro de las acciones del Plan Impulso, es «una muestra más de la estrecha y satisfactoria colaboración entre ambas entidades». Asimismo, indicó que, en este caso, «unimos nuestros esfuerzos para desarrollar un medio que permita poner en contacto de forma profesional la oferta de empresa y negocios en proceso de traspaso con nuevos inversores y emprendedores».

Sobre el Plan Impulso, el presidente de la Diputación aseguró que se está convirtiendo en una herramienta muy útil para «acorralar» a la crisis económica.

Y es que, según resaltó desde su puesta en marcha en el año 2013 «hay 11.708 parados menos, lo que supone una reducción del 22,04 por ciento y 30.272 afiliados más a la Seguridad Social (+15,83 por ciento)», aunque «nuestra principal preocupación son los 41.404 vallisoletanos que buscan un empleo».

Jesús Julio Carnero afirmó que el proyecto también ha supuesto una inversión de más de cinco millones de euros en acciones que buscan fomentar el espíritu emprendedor, mejorar la formación de pymes y autónomos, garantizar la financiación de proyectos viables y apoyar la innovación y la internacionalización de las empresas vallisoletanas.

Por su parte, Ángel de Miguel agradeció el apoyo de la Diputación y se puso como meta evitar el cierre de 900 empresas en los próximos diez años.

Además, subrayó que el objetivo de la iniciativa es mantener el empleo y la riqueza en la provincia, haciendo coincidir a los potenciales inversores y emprendedores con los empresarios y autónomos que, teniendo un negocio viable, quieren dejar la actividad por jubilación, fallecimiento o cualquier otra causa personal. De Miguel añadió que la mitad de las empresas que se cierran en Valladolid son viables, por lo que con «esta herramienta queremos aprovechar el patrimonio empresarial ya existente y testado en el mercado, en beneficio de los nuevos emprendedores». El coste del Centro es de 38.000 euros, de los que 30.000 serán aportados por la Diputación de Valladolid y el resto por la CVE.