Echa a andar el «Banco del Tiempo» en Arroyo para facilitar la vida a más gente

Tener tiempo, ganas de ayudar e intercambiar conocimientos con otra gente. Esto es lo busca del «Banco del Tiempo» de la localidad vallisoletana de Arroyo de la Encomienda, impulsado por Eduardo Vela, un joven vecino del municipio de 34 años, «inquieto» y que «necesita hacer algo» para superar sus problemas de salud, por los que un día tuvo que abandonar sus quehaceres diarios, y que tras darle muchas vueltas a la cabeza se decidió a poner en marcha esta iniciativa, que es el primera que se desarrolla en la provincia.

El proyecto acaba de empezar pero está calando en Arroyo de la Encomienda. Durante la primera semana muchos son las peticiones que le han llegado a Eduardo, que está archivando «para comenzar los intercambios lo antes posible».

Asimismo, indicó, en declaraciones a LA RAZÓN, que es «un sistema de intercambio de actividades, conocimientos, cuidados, donde no interviene el dinero, sino que la única moneda de cambio es el tiempo que cada persona pueda aportar en las iniciativas que ofrezca o solicite».

Una de las prioridades es que las personas se olviden del dinero y traten de mejorar la calidad de vida de sus vecinos.

Además, con este tipo de iniciativas se busca tener actitudes positivas de cooperación, comunicación y solidaridad en el municipio, así como participar en construir una ciudadanía con valores de buena vecindad y confianza en los otros, frente a individualismo y aislamiento.

Por este motivo, Eduardo Vela afirma que entre sus objetivos es ofrecer colaboración a todas las asociaciones e instituciones de Arroyo de la Encomienda, como recogida de alimentos, colectas para ayudar a discapacitados o campañas solidarias, para «aportar un granito de arena para que la sociedad sea mejor, sobre todo en estos tiempos tan difíciles».

«Más de 200 actividades ofertamos», añade, «de muy diversos sectores; desde acompañar a personas mayores, cuidar niños, arreglar un grifo de una casa, pasear al perro hasta cortar el pelo o enseñar idiomas».

Eduardo Vela, que deja claro que su «labor es altruista» y que «no está vinculado al Ayuntamiento de Arroyo», sólo le prestan una oficina en la Casa de Cultura; asegura que «la gente tiene habilidades con las que se puede ayudar a otros vecinos, y eso es un poco lo que se busca aquí».

Además, afirma que la iniciativa es, en un principio, para empadronados en el municipio vallisoletano, mayores de dieciocho años, pero «no vamos a cerrar puertas a nadie ni a ideas que nos puedan proponer los socios». Por este motivo, explica que cada mes se reunirán para «conocer como transcurren los servicios e impulsar las novedades».

El gestor del «Banco del Tiempo» de Arroyo de la Encomienda tambien informa de que «no hay un tiempo límite para devolver el servicio; lo realizará cuando uno pueda». Eso sí «llevaré un control exhaustivo para conseguir que las cosas salgan bien y si alguien lleva cuatro meses sin participar en el proyecto, le llamaremos para que nos de una explicación y para saber si quiere seguir aportando sus experiencias», reitera.

Sobre las primeros contactos, a Eduardo Vela le ha «sorprendido» la buena aceptación que ha tenido el proyecto. «Esperemos que la cosa sigua igual de bien, aunque tampoco quiero ponerme grandes metas al principio, y con llegar a los 200 socios me conformo», asegura.

Los interesados pueden llamar al teléfono 983 40 82 22 o en la oficina de la Casa de Cultura de Arroyo de la Encomienda, los martes y jueves de 9.30 a 12 horas.