El vallisoletano Paco Díez, centinela de las músicas tradicionales ibéricas

Considerado por muchos como el último guardián de las tradiciones ibéricas, el músico vallisoletano, Paco Díez, sigue al pie del cañón, con su personal voz y acompañado de una guitarra, una zanfona, una gaita o una mandola, entre otros instrumentos, tras casi cuarenta años de trayectoria musical.

Y lo hace con nuevas y renovadas ilusiones, en su afán por seguir acercando a la gente, y especialmente a los jóvenes, los instrumentos musicales tradicionales así como la Cultura Sefardí, de la que es el mayor especialista español y un obligado referente en el mundo. De hecho, recientemente ha sido distinguido en París con la medalla de plata de la «Ligue Universelle du Bien Publique”, por su labor de recopilación y difusión del saber tradicional de la Península Ibérica, la denominada la Sefarad bíblica.

«Es una rica cultura que, poco a poco, está remitiendo, por la avanzada edad de los últimos sefardíes que hablan ladino y por la dificultad que entraña llegar a los jóvenes, cada vez más globalizados, cuando la gran mayoría desconocen la lengua, los instrumentos y la forma de interpretar esta música», señala a LA RAZÓN Paco Díez, quien, pese a todo, no arroja la toalla, y apuesta porque en los programas educativos se pueda enseñar a los niños los instrumentos musicales tradicionales pero, también, por que los padres quieran también conocer y difundir esta cultura entre sus hijos y disfrutar de ella juntos.

raíces castellanas

«Mi interés por nuestra música tradicional viene de oír contar y cantar a las personas mayores en casa o en la bodega y de escuchar a los hombres y mujeres cantando mientras hacían sus labores en casa o mientras faenaban duro en el campo, pues la mayor parte de nuestro repertorio vocal tradicional nos viene de los cantos de labor que se entonaban para paliar y suavizar las duras tareas, al tiempo que liberaban el alma», explica Díez.

Él, mientras tanto, trata de llegar a los más jóvenes en el Aula-Museo de Instrumentos Ibéricos que gestiona en la localidad vallisoletana de Mucientes, a través de Conciertos Didácticos o de visitas guiadas no solo para escolares, sino para todo tipo de colectivos, dando a conocer las raíces castellanas e ibéricas a través de una exposición de más de 450 instrumentos musicales de España y Portugal que, en su mayoría, el músico puede ilustrar física y acústicamente, así como de una importante colección de gaitas del mundo. «Los castellanos atesoramos una impresionante Cultura y yo soy un privilegiado por disfrutar de ella y además poder transmitirla», apunta el folclorista.

Para este 2018 dice tener numerosas actividades y conciertos previstos, ya sea actuando junto con su grupo La Bazanca o con Esencias de Sefarad, acompañado por el guitarrista flamenco Raúl Olivar.

Además, avanza una posible gira en otoño por varias ciudades de Turquía como Estambul, Esmirna o Ankara e incluso norteafricanas como Marruecos, con su última propuesta, Tres Culturas Tres (judía, cristiana y musulmana), donde entremezcla sonidos ibéricos, centroeuropeos, mediterráneos y norteafricanos con la guitarra flamenca como hilo conductor, y al son del laúd árabe, la derbuka, el riqq y el bendir, el violín, el saz, la mandola y la voz de cuatro intérpretes y amigos, representantes de las Tres Culturas.

«Este proyecto me encanta porque mostramos que a través de la música no hay diferencias, destacando la hermandad entre nosotros y la voluntad de aprender de la Cultura del prójimo», señala.

Finalmente, adelanta que proseguirá con sus Jornadas Didácticas por la provincia, acercando a los Centros Escolares nuestra Cultura y Música Tradicionales, «con el inestimable apoyo de la Diputación».