Castilla y León
La Diputación y el Arzobispado de Valladolid se unen para sensibilizar sobre la trata de personas
El Palacio de Pimentel acoge hasta el próximo 10 de noviembre la muestra «Punto y seguimos. La vida puede más», que inauguran el presidente de la institución, Conrado Íscar, y el cardenal Ricardo Blázquez
La Diputación y el Arzobispado de Valladolid se han aliado para visibilizar y sensibilizar ante la situación de abuso y explotación de personas a través de la muestra fotográfica «Punto y seguimos. La vida puede más», que se puede contemplar en el Palacio de Pimentel hasta el próximo 10 de noviembre. Una exposición que se encuentra promovida por el Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones a través de la sección de Trata de Personas y con la colaboración del Centro Albor.
Durante su intervención, el presidente de la institución vallisoletana, Conrado Íscar, ha reiterado el compromiso permanente de la Diputación en «la lucha contra cualquier tipo de explotación humana, especialmente de mujeres y niños». En este sentido, ha recordado que «uno de los ejes fundamentales sobre los que se estructura el VI Plan de Igualdad de Oportunidades y contra la Violencia de Género incide de manera especial en hacer patente un compromiso con el modelo de ciudadanía global para un mundo más equitativo, sostenible e igualitario».
Asimismo, ha señalado que «el Plan incluye una línea de trabajo con el objetivo de sensibilizar y mostrar las consecuencias perversas para las mujeres del consumo de prostitución y concienciar a la población para luchar contra la explotación sexual, que lamentablemente suele ser el destino que las mafias tienen reservado para las mujeres a las que someten a situaciones como las denunciadas por esta exposición», ha declarado.
Por su parte, el cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, pidió hacerse eco contra la «lacra» de trata de personas que «humilla» especialmente a la mujer y contra el «mercadeo horrible» del cuerpo de la libertad y que causa sufrimiento en una sociedad que convive en su entorno con esos hechos sin advertirlo, «Este tipo de exposiciones es un aldabonazo a la conciencia de los ciudadanos y cristianos que conviven con hechos humillantes sin advertirlo, que nos depersonalizan a todos», ha argumentado Blázquez, quien ha advirtido de que convertir a una persona en «mercadeo» por dinero es «horrible» y va contra la libertad y causa sufrimiento.
La muestra se compone de 41 fotografías realizadas por Fernando Mármol Hueso y, junto a ellas, se suman cuatro paneles de texto que ilustran y explican lo que expresan las imágenes. Se estructura en tres apartados diferentes que tratan el drama de las víctimas, la indiferencia entre el abuso y la explotación y la esperanza en la construcción de un futuro libre.
Para ello se ha contado con la participación de personas que han sobrevivido a la trata de seres humano, así como con proyectos de atención y acompañamiento de entidades religiosas. Las frases que aparecen también han sido recogidas de los testimonios de las víctimas.
La muestra se puede ver en horario de 10 a 14 horas y de 19 a 21 horas, hasta el 10 de noviembre.
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