Los alcaldes demandan cada vez más la rehabilitación de sus barrios

PALENCIA– La rehabilitación de viviendas situadas en los cascos urbanos y en barrios de las ciudades y pueblos de nuestra Comunidad, es una de las principales patas en las que se quiere apoyar el Gobierno regional, en detrimento de la promoción de viviendas, para aliviar la delicada situación de las empresas del sector de la Construcción, pero también para crear empleo en Castilla y León en los próximos años, que tanta falta hace.

Pero además, esta apuesta por la regeneración urbana de los edificios más envejecidos pretende otro objetivo que no es otro que preservar la arquitectura y el urbanismo existente en la Comunidad, especialmente en el medio rural, donde habitan más de la mitad de los 2,5 millones de habitantes de esta tierra. Y siempre, bajo la premisa de dar respuesta a las inquietudes y necesidades que demandan las familias y las personas. En estos momentos, la Consejería de Fomento lleva a cabo un total de 58 actuaciones en Áreas de Rehabilitación Integrada (ARI) a lo largo y ancho de la Comunidad, que afectan a más de quince mil viviendas. Como por ejemplo, la que se está ejecutando en el popular barrio del Carmen de Palencia, que data de la década de los años 40 del pasado siglo, y en el que se está reformando más de medio centenar de viviendas que se encontraba muy deterioradas así como su entorno. Actuaciones que cada vez son más demandadas por los ayuntamientos de la Comunidad. El boca a boca funciona entre los alcaldes, en un primer momento reticentes a este tipo de reformas, pero que tras comprobar los resultados no solo han cambiado de opinión sino que además animan a otros alcaldes a llevar a cabo este tipo de rehabilitaciones. Tal es la demanda que desde la Consejería de Fomento apuntan que cada semana reciben al menos una petición de rehabilitación urbana en algún pueblo, y que en estos momentos tienen más de setenta peticiones encima de la mesa que están estudiando, sin contar las 58 mencionadas anteriormente que ya están en marcha. El Gobierno regional lo tiene claro y es consciente de las oportunidades económicas que abre la rehabilitación urbana en estos momentos. Por ello, antes de que finalice el presente año aprobará en las Cortes de Castilla y León la Ley de Regeneración Urbana, con la finalidad de preservar la arquitectura urbana y especialmente la rural, pero también dar respuesta a las necesidades urbanísticas que demanda la sociedad actual en materia de sostenibilidad.

Reforma y alquiler

La política de vivienda de la Junta en materia de vivienda en los últimos tiempos pasa por el fomento del alquiler y la rehabilitación en lugar de la tradicional apuesta de años atrás de la promoción de viviendas, ya agotada. Tal es así, que el pasado año, la Consejería de Fomento actuó en once ARI con un parque de más de dos mil viviendas, a las que hay que sumar otras cuatro zonas ya declaradas en pueblos, y otra treintena de actuaciones más previstas para este año que se financian entre todas las administraciones

Y en materia de alquiler, la Junta pondrá en marcha un plan de Fomento del Alquiler, que agilizará procedimiento de intermediación, así como la seguridad fomentando la suscripción de seguros que cubran impagos o desperfectos. Además, establece un límite en la renta a pagar, que será del 80% del precio de alquiler de una vivienda de protección oficial.

La Ley de Regeneración Urbana, para finales de año

Antes de que termine este año, las Cortes de Castilla y León debatirán primero y aprobarán después la Ley de Regeneración Urbana, una normativa llamada a dar el impulso definitivo que necesitan los barrios más envejecidos de la Comunidad así como el sector de la Construcción, el más afectado por esta crisis que parece no tener fin. Esta Ley mejorará la coordinación entre las ciudades y sus alfoces, integrará el medio urbano y el natural, desarrollará el urbanismo de proximidad, facilitará la eficiencia del transporte público e impulsará un desarrollo sostenible.