Absuelto el joven que grabó una agresión racista en el metro

Tendrá que participar en programas formativos y eliminar comentarios neonazis en las redes sociales

Fue un episodio muy polémico en su día. El joven considerado neonazi que en junio de 2014 grabó y difundió en las redes sociales una agresión racista cometida por un amigo, menor de edad, en el metro de Barcelona, aceptó ayer una pena de dos años de cárcel, que no cumplirá al carecer de antecedentes, y si participa en cursos sobre derechos humanos y no comete más delitos en tres años. entre otras condiciones.

En el correspondiente juicio, el joven ratificó el acuerdo de conformidad alcanzado entre el fiscal de Delitos de Odio y Discriminación, Miguel Ángel Aguilar, que inicialmente solicitaba tres años de prisión, y su abogado.

El acusado, que pidió perdón a la víctima, un joven inmigrante de origen asiático, aceptó dos años de cárcel por los delitos contra la integridad moral, una falta de lesiones y por provocación a la discriminación, al odio y a la violencia por motivos xenófobos y racistas, aunque no ingresará en prisión si cumple con las contraprestaciones exigidas por el Fiscal, que la juez incorporó en la sentencia dictada «in voce».

Para que se mantenga la suspensión de la pena de cárcel, el joven no puede volver a delinquir en los próximos tres años, debe cerrar los perfiles de tinte neonazi que tiene inactivos en las redes sociales, cumplir la orden de alejamiento respecto a la víctima y participar en sendos programas formativos de Justicia Juvenil impartidos por la Generalitat.

Uno es sobre Derechos Humanos y respeto a la diversidad y otro sobre el tratamiento de conductas violentas. Otros de los requisitos exigidos son que el chico, que no tiene antecedentes penales, abone en plazos «razonables y realistas», según el fiscal, los 4.550 euros de indemnización aún pendientes, después de que el acusado ya pagó a la víctima, antes de que se celebrara el juicio, los primeros 5.000 euros. El acusado también fue condenado a una multa de 1.920 euros.

Ante la juez, el joven se limitó a dar la conformidad al acuerdo con la Fiscalía y a pedir perdón a la víctima, una de las condiciones impuestas por el ministerio público para rebajar su petición inicial de tres años de cárcel.

Por su parte, los Mossos d’Esquadra elaborarán dentro de tres años un informe para corroborar que el condenado no ha incumplido ninguno de los puntos del acuerdo, ya que de hacerlo el fiscal se opondría a la suspensión de la pena de cárcel aceptada ahora por las partes. Por lo tanto, tiene que cumplir su parte.