Aparecen destrozados una veintena de taxis en Barcelona

El sindicato Élite Taxi denuncia el aumento del vandalismo en unos últimos meses polémicos para el sector.

Hace pocos días que finalizó la huelga de taxis en Barcelona, pero ayer el sector volvió a ser noticia. El sindicato Élite Taxi, el principal convocante del paro, denunció que una veintena de estos vehículos sufrieron actos vandálicos nocturnos. Aparecieron por la mañana con cristales rotos, pinchazos y rayadas, en el área metropolitana de la ciudad.

El presidente del sindicato, Alberto Álvarez, explicó que los taxis afectados tenían las ventanillas y los parabrisas delantero y posterior rotos, pero ninguno de ellos sufrió robos en el interior. La mayoría de los vehículos con desperfectos aparecieron en la zona del Eixample barcelonés, aunque también hubo casos en Badalona y L’Hospitalet.

En un principio, se habló de 18 vehículos afectados, después se elevó a 20, y ayer no se descartaba que la cifra pudiera incrementarse, teniendo en cuenta que algún taxista haya podido denunciar otra acción parecida a los Mossos d'Esquadra por su cuenta.

Álvarez aseguró que ha sufrido en seis ocasiones actos vandálicos parecidos, y precisó que algunos de los taxis afectados se encontraban estacionados entre las calles Sepúlveda y París del citado distrito del Eixample.

Investigación

Por su parte, los Mossos abrieron una investigación para aclarar las circunstancias, ya que ayer se desconocían los detalles de los hechos.

Otro miembro de Élite Taxi reafirmó que estos hechos acaecidos son algo habitual, porque durante el último año, según dijo han sido frecuentes los ataques a taxis.

Aseguró que desde el sector tienen sus «sospechas» acerca de los autores de estos actos vandálicos, y reiteró que lo sucedido «ha pasado más veces desde que llegó esta gente –quizá en una alusión a los conductores que operan con licencias VTC– al mercado».

El portavoz sindical, Álvarez, también insistió en la cantidad de ocasiones que han sufrido ataques vandálicos. De esta manera, desvinculó los nuevos ataques de la huelga que el sector realizó hasta la pasada semana. El paro fue por la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) de mantener la suspensión cautelar de la limitación de licencias de vehículos de alquiler con conductor, los citados VTC del Área Metropolitana de Barcelona (AMB).

Señaló Álvarez que «desde que entró Cabify en Barcelona, en diciembre de 2016», se han encontrado con este tipo de ataques a los taxis, aunque admitió que no pueden atribuir directamente estos actos a los conductores con licencia VTC.

También detalló que «en 2017 se presentaron más de 500 denuncias por vandalismo» contra taxis en el área metropolitana de la capital catalana.

Una de las protestas de taxistas que colapsó el centro de Barcelona terminó con escenas de violencia y enfrentamientos entre varios manifestantes y los Mossos, que se vieron obligados a dispersarlos. La manifestación del sector, que se desplazó desde la sede del TSJC hasta la Delegación del Gobierno, transcurrió sin incidencias hasta el final, cuando algunos grupos de taxistas agredieron a vehículos con licencia VTC y los agentes intervinieron. La huelga finalmente terminó casi dos días después.