Bienvenidos a la mansión de los deseos cumplidos

El cabaret es un género en el que no caben los prejuicios, donde las caras largas sólo están permitidas a la entrada, porque a la salida la sonrisa es de escándalo. El cabaret ni siquiera es un género teatral, es un mordisco al nervio que electrifica los cuerpos, los revitaliza y los transforma en placer y desmayo. El cabaret maldito, entonces, no es más que la sublimación de todo esto, la gran casa donde abandonarse para siempre y vivir a imagen y semejanza de tus propios deseos, por muy alocados, desviados o prohibidos que sean.

El próximo mes de febreros, en el Port Vell se abrirá el esperado «Cabaret maldito», ambicioso espectáculo con cerca de 40 artistas sobre el escenario y que es la tercera parte de la exitosa trilogía Circo de los Horrores. No han escatimado en gastos para repetir el éxito de las otras dos partes y que llevaron a 40.000 personas al teatro en Barcelona. En esta ocasión, con un presupuesto de un millón de euros, y dos grandes carpas, buscará hacer soñar a los espectadores con un mundo donde todo está permitido.

Suso Silva vuelve a ponerse al frente de una producción en la que interpreta al papel de Lucifer. De nuevo mezcla circo, humor, horror, teatro y mucha imaginación para seducir a unos espectadores que no tendrán más remedio que convertirse en protagonistas. «Queríamos hacer algo diferente a los dos espectáculos anteriores y apostamos por hacerlo más narrativo, que sea un cabaret donde se expliquen historias, y que invite a los espectadores a pecar», comenta Silva.

Dentro de los 32 artistas que suben al escenario hay de todo, desde cinta aérea venida desde Italia a patines acrobáticos, péndulo de la muerte, contorsonistas venidos desde Etiopía, incluso acrobacias acuáticas. Si Siva es Lucifer, Raquel Maldonado es Mmma Loba, Raúl Massana, Fausto, María García, Lilith o Francisco José García como La Perversa. Todos aquellos fans de «American Horror Story» disfrutarán una barbaridad con la estética kitsch de este espectáculo que es imposible que deje indiferente. «Siempre buscamos hacer cosas nuevas, cosas que sorprendan, y cada vez es más difícil, pero eso no nos para», afirma Silva.

El éxito de la compañía es tal que ya es una marca internacional, con representaciones en medio mundo. Y no se queda aquí, porque ya preparan una cuarta parte en la que prometen hacer lo nunca visto.

Dónde: Port Vell, Paseig Joan Borbó-Pla de Miquel Tarradell

Cuándo: A partir del 3 de febrero l cuánto: 18-55 euros.