CiU busca el apoyo del PSC para gobernar Barcelona

Trias también lanza sus redes sobre ERC para echar a Colau.

CiU sabe que el PSC tiene la llave para echar a Ada Colau de la alcaldía de Barcelona, pero también que su pacto de gobierno complica sobremanera la jugada. El portavoz de los convergentes, Joaquim Forn, anunció en el pleno del viernes que su grupo iniciaría conversaciones con el resto de la oposición para buscar una mayoría alternativa a la de BComú dada la «parálisis» de su ejecutivo. CiU decidió dar un paso al frente después de que su propuesta de reprobación a Colau se aprobase con los votos favorables de ERC, C’S y PP.

La idea de los convergentes es formar una mayoría alternativa con ERC, que el viernes ya anunció su predisposición a «hablar con todo el mundo de los problemas reales de Barcelona», y el PSC. «Tenemos más capacidad de hacer cosas con los socialistas que ellos con Ada Colau», declaró ayer Forn en Catalunya Radio. Toda una declaración de intenciones para que el jefe municipal del PSC, Jaume Collboni, rompa su pacto de gobierno con BComú y explore otras vías para mantenerse en el poder, a pesar de haber cosechado los peores resultados de la historia (el PSC sólo tiene 4 concejales).

Si ERC acepta el emplazamiento de su socio en el Parlament y lo acepta Collboni, sumarían juntos 19 ediles. Una cifra que colocaría a Colau en la cuerda floja pero que obligaría a CiU a seguir las negociaciones con el resto de fuerzas, ya que que necesita 23 concejales (mayoría absoluta) para sacar adelante la moción de censura.

El mismo Forn reconoció ayer que lo que propone «es complicado». Más teniendo en cuenta que el líder del PSC, Miquel Iceta, propuso ayer presentarse a las elecciones autonómicas junto al partido de izquierdas que promueve Colau.

Por su parte, el Partido Popular, que ya había emplazado a todos los grupos con anterioridad a formar una mayoría alternativa, recordó a los convergentes que «hay más opciones de gobierno posibles». «Creer que la única alternativa pasa por CiU y ERC es ir de farol», manifestó ayer el líder municipal del PP, Alberto Fernández, que recordó que para asegurar la gobernabilidad en el consistorio todos los partidos deberán hacer concesiones.

Además, emplazó a Xavier Trias a buscar otras opciones porque «la aritmética del consistorio no es la misma que la del Parlament», donde Junts pel Sí consiguió los apoyos de la CUP para la investidura. En el Ayuntamiento de Barcelona, la suma de los ediles de ERC, CiU y CUP no serían suficiente para conformar una alternativa a Colau.

Lo cierto es que en el pleno del viernes toda la oposición aprovechó para leer la cartilla a la alcaldesa por su falta de diálogo, algo necesario gobernando en minoría, así como su política de gestos con la que, dicen, tapa su inacción.

Entre las críticas más recurrentes al ejecutivo de BComú, está la su incapacidad para aprobar los presupuestos, las ordenanzas fiscales y el plan de actuación municipal. A ello se suma la cantidad de tareas pendientes como la culminación de las obras de la Diagonal, Paral·lel, el cubrimiento de la Ronda de Dalt, o la negativa a ejecutar las dos fases del túnel de Glòries. O las polémicas estériles en las que ha estado envuelta el gobierno, como la exposición de Franco o la polémica por la estatua de Colón.