Colau instalará barracones escolares en la nueva Modelo

El colegio «Eixample I» será el primer equipamiento del espacio recuperado de la prisión.

Tras 113 años de historia, la cárcel Modelo dejará de existir como tal el 1 de julio de 2017. Tras muchas reivindicaciones vecinales y tantas promesas infructuosas de las distintas administraciones finalmente hay una fecha definitiva de cierre. Los nuevos usos que a partir de ahora se darán a los terrenos que ocupan esta histórica prisión (dos manzanas del Eixample, que se traducen en 26.500 metros cuadrados) están todavía definiéndose de acuerdo a las directrices del plan director de transformación de este solar consensuado en 2009, durante la alcaldía de Jordi Hereu.

No obstante, el ejecutivo de Ada Colau adelantó ayer el primer equipamiento que tendrá cabida en esta histórica prisión: los barracones de la «Eixample I». Lejos de lo que pueda evocar el nombre, se trata de la reivindicada nueva escuela del barrio. El colegio, de dos líneas de P3 y aproximadamente 50 plazas, empezará a funcionar el próximo curso en módulos prefabricados que se instalarán en los terrenos que dejaron libres los primeros derribos simbólicos, concretamente en la confluencia entre las calles Entença y Roselló.

«No se nos ocurre una mejor forma de inaugurar el nuevo espacio. Es la mejor radiografía del futuro de la ciudad: pasar de una prisión a una escuela», señaló la concejal del distrito, Montserrat Ballarín, ayer en rueda de prensa, a la que también asistió la teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laia Ortíz. Precisamente esta última es la que hizo una advertencia a la Generalitat para que destine la inversión suficiente para construir esta nueva escuela. Su construcción definitiva todavía no tiene un calendario marcado, de forma que funcionará inicialmente en barracones, cuyo coste asumirán entre el ayuntamiento y el Consorcio de Educación de Barcelona.

Además, adelantó que este mismo solar podría dar cabida en un futuro a una segundo centro educativo, la escuela Entença porque precisamente abrió con la previsión de instalarse en la Modelo cuando esta echara definitivamente el cierre.

La concejal del distrito explicó que como el Eixample es la zona de la ciudad más condensada y la que más falta equipamientos padece en relación a sus vecinos, el gobierno de Ada Colau está intentando rascar espacios libres en otros puntos del distrito, con la reciente suspensión de licencias y el anuncio del estudio de la compra de 10 solares situados en todos sus barrios.

Mientras se deciden los demás usos de la Modelo –los integrantes del proceso participativo lo decidirán previsiblemente en el segundo trimestre del año–, Ballarín planteó la posibilidad de abrir mientras tanto esta histórica prisión a la ciudadanía.