Donde lo mejor de la cocina tailandesa moderna se mimetiza con la gastronomía occidental

La propuesta del Koh-ndal combina platos inspirados en la comida 'street' de Bangkok y otros de fusión, todos ellos pensados para compartir.

Koh-ndal Thai Bistro abrió sus puertas el pasado mes de octubre, pero en realidad éste es el resultado de un sueño, un proyecto, gestado durante muchos años.

Guy Oromí y su mujer, Sabine, volvieron a Barcelona, ciudad natal de él, en 2014 tras años residiendo en diferentes ciudades por motivos laborales y entonces ya tenían claro que querían emprender y el mundo de la gastronomía era su principal opción. Tres años más tarde, en 2017, Guy dejó su trabajo para dedicarse íntegramente a hacer realidad su proyecto: un restaurante de comida tailandesa pero con una personalidad muy definida. «Nuestra propuesta es una combinación entre una cocina auténticamente tailandesa, inspirada en la comida ‘street’ de Bangkok, ciertos toques del sudeste asiático y algunos platos fusión, que el comensal va a reconocer pero a los que se les ha dado una vuelta al incorporarles elementos tailandeses como el tipo de cocción, las salsas, las infusiones de hierbas o la presentación», explica el dueño, quien además apunta que el restaurante, como su nombre indica, también tien un toque de la gastronomía francesa.

«El establecimiento tiene el aire de un bistro y además ofrecemos varios vinos franceses y platos en los que se aprecia esa fusión», añade. «A diferencia de otros restaurantes tailandeses de la ciudad, Koh-ndal no se encasilla como un establecimiento de cocina 100% tailandesa, sino que aprovecha esta gastronomía, sus aromas, sus salsas...para fusionarla con la gastronomía occidental y todo ello en un ambiente con un aire entre bistro, chiringuito y local tailandés», señala Guy Oromí.

Y en este contexto, el producto juega un papel destacado. «La materia prima es fresca y procuramos que, en la medida de la posible, sea de proximidad, pero cuando no puede ser, importamos el producto de Tailandia», indica el dueño para a continuación comentar que, en cocina, ese producto se trata con sumo mimo. «Todo lo elaboramos aquí», asegura y al respecto señala, por ejemplo, que «la carne se trabaja a baja

temperatura antes de darle un toque de wok».

Siguiendo la tendencia actual, en el Koh-ndal también se apuesta por el concepto de convertir la experiencia gastronómica en una acto de compartir, por lo que la oferta «va hacia platillos y tapas». Además, al mediodía, se ofrece al comensal un menú por 13,90 euros, el cual consiste, por ahora, en un entrante –sopa, ensalada, gyoza o bao-, el pescado del día o noodles o curry, y postre. Sin embargo, la idea es «evolucionar hacia una propuesta de platillos», apunta Guy.

Así pues, Koh-ndal se caracteriza por ser una restaurante de cocina tailandesa moderna, fusionada con la gastronomía occidental y con importantes reminiscencias a la cultura francesa, de donde es originaria la madre de Guy, y ello está también presente en su ambiente. «La decoración también es una fusión, en este caso de cuatro ideas: se trata de un ambiente natural, con un look parecido al de un chiringuito, combinado con un aire bistro y pinceladas tailandesas, especialmente en lo que se refiere a los colores y algunos materiales que se encuentran en las playas de esa zona», explica Guy, quien apunta que «la fusión en la decoración trata de transmitir que lo que se come aquí es fusión».