Barcelona

El coche del director de los Mossos estuvo frente a la casa del jefe de Método 3 y recogió a una periodista

La Policía identificó el vehículo de Manel Prat ante el domicilio de Marco antes de su arresto. Los Mossos desmienten a la Policía

Imagen de uno de los registros que la Policía realizó de la sede de Método 3, la agencia de detectives dirigida por Francisco Marco
Imagen de uno de los registros que la Policía realizó de la sede de Método 3, la agencia de detectives dirigida por Francisco Marcolarazon

El director de los Mossos d'Esquadra, Manel Prat, podría guardar algún tipo de vínculo con la trama de espionaje político en Cataluña, la cual investiga la Policía Nacional desde que Alicia Sánchez-Camacho denunció a mediados de febrero el pinchazo de una conversación que mantuvo en julio de 2010 con Victoria Álvarez, ex amante de Jordi Pujol Ferrusola. La agencia de detectives Método 3 está en el epicentro de esta trama, puesto que ha realizado decenas de trabajos relacionados con el espionaje político. Una vez presentada la denuncia de Sánchez-Camacho, la Policía vigiló el domicilio del director de Método 3, Francisco Marco, y, para su sorpresa, identificó en sus inmediaciones al coche del director de los mossos, un Volkswagen Passat, recogiendo a una periodista que venía de reunirse con Marco. Todo ello ocurrió horas antes de que el director de Método 3 fuera detenido, el pasado 18 de febrero.

El diario «La Vanguardia» difundió ayer la identificación realizada por la Policía Nacional y los mossos se apresuraron a desmentir la información. Según la policía autonómica, el vehículo de Manel Prat ni circuló ni estuvo estacionado ante la casa del jefe de Método 3 el 18 de febrero. Sin embargo, la Policía sostiene que tomó nota de la matrícula del vehículo y comprobó que, efectivamente, pertenecía al director de los mossos d'esquadra, aunque no confirmó si Prat viajaba en el interior del coche.

Poco después de ser detenido, Marco tuvo que prestar declaración ante la Policía en Barcelona. El director de Método 3 negó que hubiera ordenado «la vigilancia y la escucha en el restaurante La Camarga a Alicia Sánchez-Camacho y Victoria Álvarez. Fuentes conocedoras de la declaración de Marco aseguraron a este diario que el director de Método 3 se situó en el centro de una conspiración orquestada por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), la Policía y una periodista –la misma que se reunió con él en el día de su arresto– para «callarle».

Según su relato, la periodista acudió a su domicilio «hablando por el móvil con un auricular inalámbrico». Mantenía en ese momento una conversación con el comisario principal de Canillas (centro policial de Madrid) y le trasladó un ofrecimiento del ministerio del Interior. Siempre según la versión del director de Método 3, la periodista le preguntó si estaba dispuesto a desplazarse a Madrid para ser interrogado por la Policía Nacional y se ofreció a hacerlo.

La inverosímil tesis de Marco es que Sánchez-Camacho era cómplice de las escuchas, una opción que la propia Policía descarta tras haber escuchado el pinchazo. La presidenta del PP catalán subrayó que es «rotundamente falso» y que jamás ha tenido contacto alguno con Método 3, puesto que no conoce a nadie de la agencia.