El frente del derecho a decidir discrepa sobre si llevar la consulta al Congreso

Las formaciones partidarias de que los catalanes ejerzan el derecho a decidir (la confusa formula que enmascara el derecho a la autodeterminación) no están de acuerdo con la estrategia política que hay que seguir, en especial con relación a su discusión en el Congreso. PSC e ICV no tienen ninguna duda sobre la necesidad de llevar el asunto a las Cortes para lograr el plácet de la soberanía nacional, CiU no lo descarta y ERC, en cambio, considera que este trámite es una «pérdida de tiempo». Las discrepancias se reproducirán esta semana durante el debate de política general en el Parlament, que comienza el miércoles, y obligará al frente del derecho a decidir a un enorme esfuerzo negociador si quiere evitar que se visualicen sus diferencias durante la votación de las resoluciones.

ICV ya tiene redactada su propuesta, que consiste en concretar en el plazo de un mes «las vías para iniciar un proceso legal desde Cataluña de solicitud al Congreso para realizar un referéndum sobre el derecho a decidir». Los ecosocialistas sugieren hacer posible la consulta en Cataluña por la vía del traspaso de la competencia en materia de referéndum que establece el artículo 150.2 de la Constitución o bien por la vía de la convocatoria de un referéndum en Cataluña por parte el Estado,como estipula el artículo 92 de la Constitución», dos opciones contempladas por el consejo para la transición nacional de Cataluña. El PSC, menos concreto, ya votó a favor de iniciar un diálogo con el Gobierno para consensuar la consulta. En cualquier caso, los de Pere Navarro abogan por involucrar a los poderes estatales en este proceso lleno de interrogantes.

ERC, por su parte, cree que es un error trasladar la cuestión del derecho a decidir a Madrid, ya que no existen aliados para impulsar el proceso. El portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, subrayó que llevar al Congreso la propuesta de celebración de una consulta sobre la independencia de Cataluña «es una pérdida de tiempo» y recordó que la Cámara Baja «siempre ha tumbado» las iniciativas sobre el derecho a decidir.

Quien menos claro tiene qué hacer es CiU, que simplemente se ha limitado a decir que no descarta llevar la consulta al Congreso. «En la medida que hay cinco vías y que algunas de ellas pasan por el Congreso de los Diputados es normal que esto esté permanentemente sobre la mesa», dijo recientemente el consejero de la Presidencia y portavoz de la Generalitat, Francesc Homs.

El PP, por su parte, se ha cansado de retar a CiU y a ERC a llevar la consulta al Congreso y, asimismo, a aceptar la votación de los diputados.