Sanidad

El Hospital del Mar utiliza un nuevo sistema para curar las arritmias

Un catéter con microelectrodos corrige las alteraciones del ritmo cardiaco

El nuevo sistema permite detectar los puntos débiles de los corazones de los afectados
El nuevo sistema permite detectar los puntos débiles de los corazones de los afectadoslarazon

El Servicio de Cardiología del Hospital del Mar comenzó a utilizar un nuevo sistema para tratar las arritmias cardíacas por ablación, mediante un catéter con microelectrodos que corrige las alteraciones en el ritmo cardíaco. Según explicó el jefe del Servicio de Cardiología del centro, Julio Martí, durante el procedimiento, se colocan unos pequeños electrodos dentro del corazón para medir su actividad eléctrica, electrodos que también se utilizan para destruir las áreas del corazón que están causando el problema.

El innovador catéter que se utiliza en el Hospital del Mar integra tres minielectrodos que aumentan las propiedades de localización, validan las características del tejido tratado y proporcionan información en tiempo real sobre la eficacia de la ablación durante el procedimiento. Según Martí, los minielectrodos permiten ver mejor las características del tejido del corazón y ayudan a interpretar mejor la arritmia.

«Un ojo en la ablación»

“Con el uso de este catéter con microelectrodos es como si tuviéramos un ojo en el punto exacto de la ablación, sabes exactamente dónde estás quemando y esto da mejores resultados», aseguró Martí.

Según el cardiólogo, «es especialmente útil en los casos donde es más complejo definir el punto concreto del corazón que se ha de tratar y, en este sentido, una mejor señal que ofrezca información precisa sobre la localización de la arritmia y de cómo está el tejido evitará intervenciones posteriores».

El nuevo dispositivo ofrece mejores señales eléctricas del corazón sin perjudicar el tratamiento mediante la ablación, lo que, según el especialista, es muy importante ya que los electrofisiólogos cardíacos llevan 20 años luchando para conseguir que los catéteres ofrezcan mejores señales eléctricas sin que ello dificulte el tratamiento de la arritmia.

«Cuanto menor es la distancia entre los electrodos, mayor es la fiabilidad del registro de la actividad eléctrica, pero, al mismo tiempo, para poder llevar a cabo la ablación, es necesario que la punta del catéter mida unos cuatro milímetros», según Martí.

«El nuevo dispositivo consigue resolver la incompatibilidad existente entre tener un electrodo lo más pequeño posible para producir la señal, pero lo suficientemente grande como para realizar la curación de la arritmia», detalló el cardiólogo sobre estos avances médicos.