El soberanismo se conjura para rebelarse ante los «ataques» estatales

«El pueblo catalán nunca renunciará al derecho de autodeterminación», dice Òmnium Cultural.

El que fuera conseller de Presidencia durante la ultima legislatura de Artur Mas, Francesc Homs, abrirá la ronda de declaraciones ante el Tribunal Superior por su activa participación en la consulta soberanista del 9-N. El lunes prestará declaración como investigado por desobedecer, malversar caudales públicos (los nueve millones que costó el proceso participativo) y prevaricar.

«Iré a declarar al Supremo con la estelada colgada», avisó Homs en julio, cuando se dictó la resolución. En caso de que decida hacerlo tendrá quien lo aplauda, pues las entidades soberanistas y varios representantes de ERC y la antigua Convergencia (entre ellos Artur Mas) viajarán hasta Madrid para acompañar al conseller, si bien no hay preparado ningún acto oficial.

Ayer, en Barcelona y ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), las organizaciones independentistas sí convocaron una rueda de prensa para expresar su apoyo a Homs y al resto de políticos catalanes que han sido llamados a declarar por desobedecer a los tribunales: Artus Mas, Joana Ortega e Irene Rigau tendrán que declarar finalmente ante el Tribunal Supremo por el 9-N, después de que el TSJC desestimara el jueves los recursos presentados por sus abogados; por su parte, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell y varios miembros de la mesa están citados por el Tribunal Constitucional (TC) por permitir la votación en la cámara catalana de las conclusiones de la Comisión del Proceso Constituyente (documento que contiene las bases de la desconexión con el Estado).

«Todavía hay tiempo para el diálogo», dijo ayer el presidente de la ANC, Jordi Sánchez, en el acto que tenía por lema «Las urnas no se imputan, defendemos las instituciones. Todos somos 9N». Sánchez trasladó al Gobierno que todavía cabe una «entente cordiale» puesto que no hay sentencias judiciales. Pero en caso de que se dicten, dijo, «el escenario será el peor de los deseados».

Con un tono menos conciliador se expresó el presidente de la Asociación de Municipios Catalanes, Miquel Busch, al declarar que «un país que no deja votar, su salud democrática no está cerca de la UCI sino en el tanatorio». Por su parte, el presidente de Òmnium Cultural avisó que «el pueblo catalán nunca renunciará al derecho de autodeterminación» y llamó a los partidos a obedecer sólo a las instituciones catalanas. «Si el Estado ataca a cualquier representante de las instituciones catalanas es un ataque a todo el pueblo de Cataluña», subrayó.

En el acto hubo una nutrida representación política. Entre los asistentes estaba la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, que también tendrá que responder por desobediencia ante el TC. En declaraciones a TV3 avisó que ninguna sentencia paralizará el proceso de independencia.

En las sillas de invitados al acto se sentaron no sólo representantes de las fuerzas netamente independentistas, PDC, ERC, CUP y Demòcrates, sino también otros como el concejal del Ayuntamiento de Barcelona, Gerardo Pisarello, y representantes de ICV, Podem e EUiA, todos ellos favorables al derecho a decidir.

Antes de que Francesc Homs declare el lunes como investigado tendrá otra muestra de apoyo ofrecida por los miembros de su partido en Arenys de Mar. Artur Mas le acompañará también en esta ocasión.