Papel
El Teatre Principal denuncia el acoso del Ayuntamiento por su cierre cautelar
El pasado viernes, entre una gran expectación, todo estaba listo para dar el pistoletazo de salida a una nueva edición del Festival Primavera Club en el Teatro Principal, emblemático espacio de las ramblas a la altura de Santa Mónica. A las 20.00 horas, Heather tocaba en el Teatro Latino, mientras que a las 20.35 horas le tocaba el turno a Holograma en el Principal. A escasos minutos de comenzar las actuaciones, operativos del Ayuntamiento entraron en el recinto y lo precintaron, enviando a todo el mundo a la calle y obligando a la organización del festival a hacer malabarismos para resituar los conciertos que ahora no tenían escenario.
Los responsables del teatro presentaron ayer un comunicado en que apuntaban su disgusto por la actuación precipitada del Ayuntamiento y el prejuicio que había ocasionado a un público que no entendía qué estaba ocurriendo. «El precinto cautelar de un local es una medida que se realiza de forma excepcional para asegurar que se cumplirá la sanción establecida de antemano o bien por temas de seguridad», escribían, negando que en ninguno de los dos casos fueran la causa en este caso. La Guardia Urbana inspeccionó el local el 18 de octubre y denunció que actuaba como discoteca sin tener licencia de ello. Ese día «había un espectáculo musical y por eso había un dj y nadie prohibe al público bailar», comentaban. El 23 de octubre ya precintaban el local.
El Principal asegura que ya cerraron seis meses para cumplir las necesidades sonoras y de licencia. «Hay que recordar que el 14 de octubre la regidora de Ciutat Vella anunció en el pleno del distrito que están negociando la adquisición del teatro para uso público».
✕
Accede a tu cuenta para comentar