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Cataluña

En el archivo de Paul Preston

LA RAZÓN consulta el fondo documental del historiador británico guardado en el monasterio de Poblet

Entre los documentos conservados por Paul Preston destacan dos volúmenes realizados por el Ejército italiano fascista en 1938 con detalles sobre la batalla del Ebro y la campaña militar realizada en Santander, con numerosa documentación fotográfica prácticamente desconocida
Entre los documentos conservados por Paul Preston destacan dos volúmenes realizados por el Ejército italiano fascista en 1938 con detalles sobre la batalla del Ebro y la campaña militar realizada en Santander, con numerosa documentación fotográfica prácticamente desconocidalarazon

Últimamente el monasterio de Poblet es, desde hace poco tiempo, el nuevo hogar del archivo personal del hispanista británico Paul Preston. Los materiales con los que ha podido sus libros sobre la historia de España, sobre todo centrados en la Guerra Civil y el franquismo, estarán pronto accesibles a los investigadores. Este periódico ha podido acceder esta semana al fondo y ha constatado la importancia del legado que Preston deja a la institución, convirtiéndola en uno de los centros más importantes de Cataluña para conocer de primera mano nuestra historia más reciente.

Desde hace años, Poblet es depositario de numerosos archivos documentales de primer orden. A pocos metros del histórico monasterio está el Archivo Montserrat Tarradellas i Macià donde se encuentran fondos como los del presidente de la Generalitat Josep Tarradellas, así como los de políticos como Jaume Miravitlles, Alejandro Lerroux o Joan Antoni Samaranch, así como periodistas como Carles Sentís o Ramon Barnils, entre otros. La presencia de Preston viene a completar de manera sobresaliente todo este conjunto.

Un patronato, formado por diciséis miembros, será el encargado de velar con la conservación de este archivo. Tanto el historiador, como el abad de Poblet, la Universidad de Barcelona, la conselleria de Cultura y el Ayuntamiento de Barcelona, serán los responsables de designar a los integrantes de este organismo.

Hasta ahora en el Archivo Montserrat Tarradellas i Macià han llegado dos entregas de documentos y libros, esperando que antes de que acabe el presente año se reciba la tercera y última. Todo ello permitirá conocer de primera mano las fuentes bibliográficas empleadas por Preston en libros como «Franco. Caudillo de España», «Las tres Españas del 36», «Juan Carlos. El rey de un pueblo», «Idealistas bajo las balas» o «El holocausto español».

La directora del centro, Montserrat Catalan, explicó a este diario que «se trata de un proceso muy largo de catalogación. Es muy laborioso y queremos respetar todo el conjunto para que este unido». Hasta ahora en el archivo han ingresado 1.115 documentos guardados hasta ahora por Paul Preston, a los que hay que sumar 2.310 libros.

¿De qué documentos hablamos? LA RAZÓN ha podido leer algunos de ellos. Destaca especialmente, en lo que hasta ahora ha sido recibido, copias de un conjunto de documentos vinculados con los corresponsales de guerra en la España de 1936, tema tratado con profundidad por Preston en «Idealistas bajo las balas». Entre ellos tiene una especial importancia la figura del estadounidense Jay Allen quien trabajó para medios como «Chicago Daily News». Fue el mejor informador: logró ser el primero en entrevistar al general Franco después del golpe de Estado del 17 de julio de 1936, así como el último en conversar con José Antonio Primo de Rivera antes de que fuera ejecutado el 20 de noviembre de 1936. Asimismo Allen logró escribir una magnífica y estremecedora crónica sobre la matanza realizada por las tropas franquistas en Badajoz.

En el archivo no solamente se custodian copias de los artículos que publicó sobre España sino también correspondencia mantenida con miembros de la Casa Blanca, en aquellos años en manos de Franklin D. Rooselvelt. En una de ellas, firmada por J.D. LeCron, asistente del Secretario de Agricultura de Rooselvelt, se agradece a Allen el envío de un memorándum sobre la aplicación que Franco realizaba de la ley por responsabilidades políticas. Poco después había escrito al Consejo Nacional de Relaciones Laborales de Washington denunciado la situación de los vencidos republicanos. En la respuesta recibida por Allen se admitía que para la Casa Blanca «España ya no es un caso especial, solamente un problema subordinado a problemas mucho más amenazantes».

La matanza de Paracuellos

Una parte del fondo está focalizado en la llamada Causa General, el tribunal franquista que inmediatamente después de la Guerra Civil, investigó los crímenes cometidos por las fuerzas de la Segunda República. Es allí donde Preston ha localizado las declaraciones de algunos de los protagonistas de, especialmente, las sacas de presos realizadas en Paracuellos del Jarama, donde fueron asesinadas unas 2.000 personas. También aparecen las palabras del policía Álvaro Marasa Barasa con un escalofriante relato de los hechos, facilitando muchos detalles sobre el número de presos que eran sacados de la cárcel de Madrid, su traslado hasta Paracuellos y cómo se realizaba la ejecución.

De otro orden son dos libros, realizados por las autoridades italianas en 1938, en aquel momento bajo las órdenes del dictador Benito Mussolini, centrados en la arquitectura de guerra. Los dos tomos que ya están en Poblet se adentran en la batalla del Ebro y en Santander. Numerosos mapas nos ayudan a ver la ubicación de las trincheras y el posicionamiento de las tropas fascistas. Los volúmenes contienen varias fotografías contemporáneas a los hechos y prácticamente inéditas desde entonces. En una de las series, por ejemplo, se nos informa del proceso de reconstrucción de un puente destrozado después de un duro bombardeo.

Otra publicación a tener en cuenta es un ejemplar de «World News and Views (Formerly International Correspondance)», del 5 de noviembre de 1938, con una serie de artículos sobre la situación de España durante el conflicto bélico, como uno con «la heroica defensa de Madrid» como uno de los objetivos.

Hay también en el archivo una copiosa biblioteca en el que la Guerra Civil y el franquismo tienen un importante peso. El fondo bibliográfico no hace distinciones entre los dos bandos enfrentados entre 1936 y 1939 por lo que hay una amplitud de miras y puntos de vista tanto de historiadores como de protagonistas de los aquellos hechos. De esta manera, por ejemplo, podemos encontrar libros del presidente de la Segunda República Manuel Azaña o de los políticos conservadores José María Gil Robles y Manuel Fraga. Tampoco faltan antologías con textos de Franco como la serie «Franco ha dicho» o «Palabras del Caudillo». Una mención aparte la merece el libro del diplomático inglés Sir Robert Hodgson, «Spain Resurgen» nacido a raíz de la política crítica del Partido Laborista –en el poder en el momento de la publicación del ensayo– sobre España.

Esta pequeña cata del archivo de Paul Preston nos permite saber que la documentación depositada arroja más luz sobre nuestra historia, además de poder valorar mejor la gran obra realizada por el historiador británico a lo largo de estos años.