Ministerio de Fomento
Fomento licita la estación de La Sagrera con la idea de inaugurarla en 2019
Colau exige que reactive las obras para cerrar la cicatriz entre Sant Andreu y Bon Pastor. Cuestiona el centro comercial para financiar el proyecto
El Gobierno sorprendió ayer a los vecinos de Sant Andreu al publicar en la web de Adif, el administrador de infraestructuras dependiente de Fomento, que ha licitado el proyecto arquitectónico para construir la estación del AVE de La Sagrera por 3.787.300 euros en un plazo de 15 meses. La ministra de Fomento, Ana Pastor, tuvo la deferencia de llamar a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para informarle en persona de que se han iniciado los trámites para reactivar las obras de La Sagrera. Pastor, conocida por su talante, trasladó a la alcaldesa que durante la redacción del proyecto, el Ayuntamiento de Barcelona podrá incorporar propuestas.
Aunque hace una semana, Colau fue a Madrid para hablar de la inversión del Estado en infraestructuras y regresó con el compromiso de que Fomento retomaría el ritmo de las obras de la estación de la Sagrera para poder inaugurarla en 2019, la alcaldesa expresó su «sorpresa e incomprensión» ante la noticia de Adif. «Grosso modo», no entiende por qué Fomento licita el proyecto arquitectónico de la estación cuando la fase de ejecución de la losa de la futura infraestructura sigue «prácticamente paralizada de manera incomprensible».
Esta losa contempla unir los barrios de Sant Andreu y Bon Pastor, separados por una playa de vías. «Los barrios del entorno –de la futura estación de La Sagrera– están sufriendo muchísimo y no pueden esperar», trasladó Colau al Gobierno a quien reprochó que «no puede ser que tenga el dinero y no lo invierta en una infraestructura tan básica».
Sobre el futuro de la estación, el debate con Fomento girará en torno a los 22.000 metros cuadrados destinados a superficie comercial que pactaron los gobiernos de CiU y PP durante el mandato de Xavier Trias.
Buscar el consenso
Inicialmente, el proyecto de La Sagrera preveía financiarse con las plusvalías generadas con la promoción de casi 2.000 viviendas y oficinas. Pero CiU y PP cambiaron de planes para poder sufragar las obras con la concesión de un centro comercial nuevo de 22.000 metros cuadrados y 6.000 metros cuadrados de tiendas de proximidad en la estación. El equipo de Colau, si bien es partidario de fomentar el comercio de proximidad está en contra de abrir un nuevo macro centro comercial que puede llegar a afectar a las tiendas de los barrios colindantes. Su idea, antes de trasladar planes a Fomento, es consensuar propuestas con los vecinos.
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