Govern y Abertis pactan una rebaja de los peajes para reactivar el tráfico

Hace años que la Generalitat adoptó por costumbre incrementar el precio de los peajes independientemente del IPC, y siempre por encima. La caída continuada del tráfico en las carreteras de pago catalanas, sin embargo, ha llevado a un replanteamiento de la situación. No en vano, desde el comienzo de la crisis se ha reducido en un 30 por ciento el volumen de tráfico en las autopistas. Por ello, la Generalitat anunció ayer que ha pactado con la concesionaria Abertis una reducción en los peajes de la C-32, en el Garraf y el Maresme, y de la C-33, en el Vallès Oriental, con descuentos que oscilarán entre el 10 y el 50 por ciento y que entrarán en vigor en enero.

Los principales beneficiados por estos descuentos serán los conductores habituales, ya que las bonificaciones se aplicarán de lunes a viernes y será necesario poseer el «teletac». Este dispositivo, que se instala en el vehículo, será gratuito para los conductores que lo soliciten. No obstante, el dispositivo va asociado a una tarjeta de crédito por la que las entidades financieras cobran entre 20 y 30 euros al año en concepto de comisión de mantenimiento.

Tras la reunión del ejecutivo catalán, el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, fue el encargado de dar los detalles del «Plan de homogeneización territorial de los peajes». El objetivo de esta «ambiciosa reforma», según el conseller, «es armonizar un modelo que tenía disfunciones y atrofias». De este modo, la Generalitat espera aumentar el tráfico de estas vías y a descongestionar las carreteras que van en paralelo. Vila destacó que los beneficios que se generarán de este marco concesional servirán para financiar políticas de transporte público, ya que se incorporará un canon de entre 1 y 3 millones dependiendo de los flujos de tráfico, «en función de la utilización de nuestra red de autopistas concesionadas, el Govern dispondrá de un apoyo para financiar políticas de transporte público». Abertis, en todo caso, se ha reservado unas compensaciones si la rebaja no conlleva un aumento sustancial de vehículos.

Vila añadió que el acuerdo con Abertis no contempla la prolongación de los plazos de la concesión actual al considerar que la compañía podrá recuperar el descuento que ahora se aplicará gracias al aumento del tráfico rodado que se generará. El conseller anunció que antes de finales de año se renegociará también el marco tarifario de la C-16 , «una de las autopistas que tiene más dificultades de sostenibilidad».

El resto de grupos parlamentarios recibieron con satisfacción el acuerdo aunque con matices. El portavoz adjunto del PP, Santi Rodríguez, destacó que los catalanes verán «una mejora importante en unos casos y sensible en otros», aunque teme que más adelante deban «lamentar el alargamiento de la concesiones». Desde el PSC, Maurici Lucena dio la «bienvenida» a esta decisión y emplazó a la Generalitat a presionar al Gobierno en materia de inversiones en infraestructuras en lugar de «la protesta permanente». Para el portavoz adjunto de ERC, Oriol Amorós, dentro de las «limitadas posibilidades de Cataluña en el marco actual», consideró «positiva» la rebaja, aunque «incompleta» ya que reclaman «los planes económicos de las concesiones».

Las bonificaciones

C-32 norte

En la C-32 a su paso por el Maresme, la reducción será del 10 por ciento del peaje entre Montgat y Mataró, mientras que en el tramo Mataró-Palafolls la autopista funcionará con un sistema de peaje cerrado. En paralelo, continuarán vigentes las bonificaciones por concurrencia, vehículo ecológico o vehículo de alta ocupación. La Generalitat calcula que los descuentos pueden llegar al 80 por ciento.

C-32 sur

Los usuarios de la C-32 a su paso por el Garraf verán como los peajes se reducen en un 30 por ciento en el tramo Castelldefels-Sitges y en un 26,5 por ciento en el tramo Sitges-El Vendrell, para equiparar así los precios por kilómetro en otras distancias similares de la misma vía. Así, un conductor con todas las bonificaciones pasaría de pagar más de 10 euros para el tramo El Vendrell-Barcelona a 5,96 euros.

C-33

En la C-33, autopista que conecta Barcelona con la autopista del Mediterráneo AP-7 a la altura de Montmeló, la tarifa de la barrera de La Llagosta se reducirá en un 48,5 por ciento. Se trata del único peaje que queda todavía en la primera corana metropolitana de Barcelona. El conseller Vila también anunció que antes de finales de año se renegociará con la concesionaria el marco tarifario de la C-16.