La CUP asistirá al pleno pero deja en suspenso su respaldo a Puigdemont

Los anticapitalistas seguirán negociando hoy con JxCat y ERC, aunque ya ha arrancado un proceso constituyente, revertir la privatización de ATLL y acabar con los conciertos de las escuelas.

Los grupos parlamentarios de JxCat, ERC y la CUP han acordado que se celebre el pleno de investidura previsto para este martes en el Parlament, en el que el candidato a la Presidencia de la Generalitat es Carles Puigdemont, aunque éste no se presente a la Cámara.

Sin embargo, la reunión entre JxCat, ERC y la CUP para acordar un programa de gobierno que invista a Carles Puigdemont concluyó ayer sin fumata blanca. Los cuperos, pese a que terminaron satisfechos del encuentro, todavía no dieron por zanjadas las negociaciones y continuarán hoy con ellas. Por el momento, aprovechando las fisuras entre PDeCAT y JxCat, logró dos compromisos de fuerte carga simbólica con la candidatura de Puigdemont: uno es revertir la privatización de Aigües Ter Llobregat (ATLL) –medida de Artur Mas– y otro es acabar con los conciertos de las escuelas que segregan por sexo (unos 30 centros en toda Cataluña, vinculados al Opus Dei)–. Además de esas dos medidas, selladas a espaldas del PDeCAT, la formación anticapitalista consiguió arrancar un tímido acuerdo para la materialización de la República con el inicio del proceso constituyente.

Con estos tres compromisos, ya trabajados días atrás pero cerrados ayer, los anticapitalistas sofocaron las dudas expresadas por Marta Pascal, coordinadora del PDeCAT, por la mañana en una entrevista por TV3. La dirigente neoconvergente, como es natural, rechazó los dos primeros acuerdos por su corte ideológico, ya que los neconvergentes, junto al PP se habían convertido en los defensores acérrimos de esas dos medidas. Respecto al tercer acuerdo, habrá que ver con cuánta ambición se despliega. Los cuperos concretaron ayer que arrancará con la organización de una Asamblea Constituyente, compuesto por diferentes cargos electos de distintas instituciones catalanas, y pretende que concluya con el proceso constituyente, que desembocaría en la constitución catalana.

En todo caso, este pacto podría quedar sin efecto si no se acaba celebrando el Pleno de investidura. La CUP fue la única formación que se expresó con rotundidad y aseguró que hoy estarán sentados en sus escaños, y exigieron que JxCat y ERC hagan lo mismo y desobedezcan la resolución del Tribunal Constitucional, Por el momento está todo en el aire, aunque la oposición constitucionalista puso el grito en el cielo para que no se lleve a cabo.

Así el líder del PP, Xavier García Albiol, pidió al presidente del Parlament, Roger Torrent, desconvocar «inmediatamente» el pleno de investidura y emprender una rueda de contactos con los grupos para encontrar otro candidato. En todo caso, si se celebrara, Albiol aseguró que no participarán en el debate. Por su parte, el PSC pedirá formalmente hoy en la reunión de la Mesa a Torrent que suspenda la sesión parlamentaria, en caso de que «las cosas no cambien» y se mantenga la candidatura a distancia de Carles Puigdemont (JxCat).