La Guardia Civil desarticula una banda de traficantes de armas

La Guardia Civil ha dado un importante golpe al tráfico de armas en el mercado negro. El Instituto Armado ha detenido a cinco personas en el marco de una operación que permitió intervenir 48 pistolas de diferentes marcas, nueve revólveres y más de 15.000 cartuchos de distintos calibres. La red de contrabando quedó desarticulada.

Fuentes de la Guardia Civil explicaron ayer que la investigación comenzó en 2011. Se encontraron unas armas en perfecto estado, que se habrían utilizado antes en hechos delictivos. Los agentes concluyeron que existía una red que conseguía pistolas aparentemente inutilizadas para la Guardia Civil, y las completaba con piezas de otras armas. Posteriormente se distribuían en el mercado negro.

Las armas que permitieron a los investigadores llegar hasta la banda procedían de una armería de Barcelona. Se practicaron cinco registros en domicilios de la capital catalana, cuatro de ellos en pisos de los detenidos, y otro en una empresa que utilizaban como tapadera para comprar las pistolas y revólveres inutilizados y las piezas para rehabilitarlas.

Además de las citadas armas y cartuchos, la Guardia Civil encontró en estos pisos cuatro silenciadores, más de 30 cañones nuevos para pistolas y armas prohibidas como una carabina y un bastón–pistola. También se intervinieron herramientas para la rehabilitaciónn, transformación y reparación de armas, abundante documentación y 4.000 euros obtenidos supuestamente de la venta ilícita de estos objetos.