La Policía confirma pagos ilegales a CDC

Un agente de los Mossos dice que Millet tenía 58.000 euros en efectivo en billetes de 500 para «gastos diarios».

La nueva jornada que se vivió en una sala ayer en la Ciudad Judicial respecto al juicio que se celebra sobre el caso del millonario expolio del Palau de la Música, confesado por su ex presidente y principal acusado, Fèlix Millet. Tras numerosas acusaciones en la vista oral, en el sentido de que la antigua CDC recibió comisiones ilegales de una empresa a cambio de la concesión de la obra pública, ayer llovió sobre mojado.

Un inspector de la Policía reafirmó, en calidad de testigo, que una empresa financió ilegalmente a CDC con «comisiones ilícitas», aunque, en la misma jornada del juicio un ex tesorero de la formación convergente, Andreu Viloca, negó cualquier entrada ilegal de dinero, en la misma línea que su predecesor, y acusado en la trama, Daniel Osàcar.

Como perito y testigo, el inspector de la Policía Nacional, especializado en blanqueo de capitales, corroboró el informe que realizó durante la investigación del caso, en el que señaló que una empresa hacía pagos al Palau, que se vestían de donaciones. La dinámica consistía en hacer llegar días después este dinero a la Fundació Trias Fargas –ahora llamada Catdem–, y vinculada a CDC, que, asimismo, a través de los préstamos ficticios pasaba estos fondos al partido. En otras ocasiones, supuestamente se usaba al grupo empresarial de New Letter, Letter Graphie y Mail Rent como mediador para el desvío.

Por otra parte, Millet justificó durante el registro de su casa que tenía unos 58.000 euros en casa en billetes de 500 para «gastos diarios», según desveló en el juicio uno de los investigadores.

Según detalló un mosso, Millet tenía durante el registro dos sobres en la caja fuerte en la primera planta de su casa de l’Ametlla del Vallès. Uno con 13.000 euros y otro con unos 45.000, todos en billetes de 500.

Pero ésta sólo era una mínima parte del dinero que Millet guardaba en efectivo, ya que disponía de una caja de seguridad en una entidad bancaria, donde contaba con 1,8 millones de euros, también en sobres y en billetes de 500.

El tesorero de CDC Andreu Viloca, que está investigado en el caso del 3 por ciento, afirmó en el juicio que «no conoce ningún tipo de entrada de dinero en el partido que no sea legal», y justificó que la fundación afín pagara al partido por prestarle servicios. Viloca compareció como testigo y se negó a responder a muchas preguntas. Recurrió en varias ocasiones a la falta de «memoria histórica» para entrar en detalles sobre la financiación del partido.