Mas se rodea de afines a Batasuna para impulsar el derecho a decidir

«Cuantos más seamos, mejor». Éste ha sido siempre el planteamiento de base del presidente de la Generalitat, Artur Mas, para abrir paso a la consulta soberanista que planea convocar, en principio, el próximo año. Mas está convencido de que sólo rodeado de una gran mayoría social y política puede llegar a celebrarse la consulta y, para eso, ha citado a 25 entidades el próximo 26 de junio en el Parlament con el fin de escenificar que hay una mayoría de catalanes que quiere decidir su futuro político. Entre las 25 entidades, si no se produce un veto de última hora, estará presente ARRAN, una organización que agrupa a jóvenes colectivos identificados con el independentismo revolucionario. Entre éstos figura Maulets, histórico aliado de las sucesivas juventudes batasunas (Jarrai, Haika y Segi).

La influencia de la CUP

CiU siempre ha querido distanciarse del movimiento abertzale, pero la presencia de la CUP –la formación independentista y anticapitalistan que ha irrumpido esta legislatura en el Parlament– en el pacto del derecho a decidir que se firmará el 26-J ha abierto la puerta a Maulets.

El Govern pidió a CiU, ERC, ICV y CUP que propongan, cada uno de ellos, a cinco entidades para formar parte del grupo de trabajo que impulsa el proceso y, poco a poco, se van conociendo los nominados, aunque persiste la discreción porque no están atados todos los firmantes. La CUP, sin embargo, no ha tenido inconveniente en dar a conocer su lista de candidatos. Son, además de ARRAN, los siguientes: la Coordinadora de Asociaciones por la Lengua –que reivindica la unidad del catalán en los denominados Països Catalans–; el Frente de Liberación Gay de Cataluña (FAGC); la Red de Economía Solidaria; y el Centro Internacional Escarré para las Minorías Étnicas y las Naciones (Ciemen).

Este último centro ha sido objeto de varias subvenciones por parte de la Generalitat por su labor de impulso a la autodeterminación de los pueblos de todo el mundo en diversos foros de debate.

Se prevé que, entre los firmantes del pacto del derecho a decidir, también figuren organizaciones sindicales como Comisiones Obreras (CC OO) y UGT, así como patronales como Pimec. Asimismo, estarán presentes, entre otras, entidades políticas como la Asamblea Nacional Catalana –organizadora de la última marcha independentista de la Diada–, Òmnium Cultural –promotora de la manifestación posterior a la sentencia del Estatut– y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).

Quien no estará presente en esta foto será el PSC, cada vez más descolgado de un proceso que identifica con la independencia y no con el derecho a decidir.