Puigdemont abrirá la ronda con la oposición el 27 de enero

El flamante presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, dio a conocer ayer la fecha en la que se reunirá con la líder de la oposición, Inés Arrimadas. Será el 27 de enero, tres meses después de la celebración de los comicios catalanes. El nuevo Govern, formado por ERC, CDC e independientes, tiene fijada una hoja de ruta hacia la independencia. Se estableció previamente a las elecciones catalanas del 27–S, como baza para tratar de atraer todo el voto independentista, ante la incertidumbre que despertaba la CUP sobre sus maniobras posteriores a las elecciones. En ella, CDC y ERC acordaron lograr la escisión del Estado español en 18 meses. Y también anunciaron que las elecciones sustituían el deseado referéndum, y que votar a Junts pel Sí suponía «un pronunciamiento favorable a la independencia de Cataluña». Lo suscribieron las entidades soberanistas más relevantes en el proceso: la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI); la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC); y, Òmnium Cultural.

En la hoja de ruta se plasmó que en los siguientes 10 meses a los comicios se elaboraría el texto constitucional de la hipotética República Catalana. Pero hasta el momento, el paso más alargado y atrevido que han dado las fuerzas soberanistas en el Parlament fue la resolución que aprobaron el pasado 9 de noviembre. Pero ante el dilatado y embrollado proceso de investidura, la medida se quedó en agua de borrajas, y el impulso soberanista se ha ido debilitando.

Además, las reticencias mostradas por Puigdemont sobre los plazos para lograr la independencia, han incendiado a la CUP. Ante esta tesitura, cabría esperar un empujón de las fuerzas independentistas concretado en una medida soberanista inesperada y de peso.

Aún está por concretar la hora exacta del encuentro, pero tras una semana y media de la investidura del nuevo presidente de la Generalitat y la organización del Ejecutivo catalán con el nombramiento de los diferentes Consellers, se podría especular que hasta el próximo miércoles el nuevo Govern anuncie medidas relevantes, en la línea de las palabras que pronunció Puigdemont en su primer pleno ordinario: «quiero dejar Cataluña a las puertas de un nuevo Estado».

Esta primera reunión se enmarcará en la intención de Puigdemont de mantener un diálogo y negociación con la oposición del Parlament, como sostuvo durante en la cámara catalana para dar cuentas del nuevo ejecutivo catalán, como también se celebrarán posteriormente otros encuentros con los dirigentes de las otras formaciones catalanas. Durante el encuentro, según fuentes de Ciutadans, la actitud de Arrimadas será la de mano tendida sobre cuestiones que afecten a políticas sociales, económicas o medioambientales, entre otras, y le trasladará su firme oposición al proceso independentista y a todo lo que suponga «saltarse el marco constitucional y las leyes».