TMB exige más servicios mínimos para evitar aglomeraciones

El Metro de Barcelona pierde un 25% de usuarios el primer día laborable de huelga.

Los trabajadores del Metro estrenaron las huelgas de este año coincidiendo con la celebración del Mobile World Congress. Cinco meses después, trabajadores y empresa todavía no han llegado a un acuerdo y los usuarios vuelven a pagar esta falta de entendimiento. Ayer en su enésimo día de huelga del año, el 25 por ciento de usuarios habituales dieron plantón al Metro. Aunque el hecho de que hubiera menos pasajeros que un día habitual no evitó aglomeraciones, sobre todo, en hora punta, a primera hora de la mañana. Para muestra la L5 en las estaciones de la Sagrada Familia y Sagrera.

En la línea azul, tuvo que intervenir Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) para realizar regulaciones de pasaje en los enlaces de las estaciones de La Sagrera y Sagrada Familia con la intención de evitar que se superara la capacidad de los andenes.

Horas puntas

A las 09.00 horas ha finalizado la franja de mañana de los paros, que ha coincidido con la hora punta –entre las 7.00 y las 9.00– y en la que ha operado el 40 por ciento de la oferta, de acuerdo con los servicios mínimos decretados por el departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat.

A partir de las 07.00 horas, el descenso de validaciones fue del 25 por ciento aproximadamente respecto al lunes anterior. En el paro de la franja de tarde, desde las 16.00 y hasta las 18.00 horas, el Metro volvió a funcionar con un 40 por ciento de la oferta. La horas más complicadas fueron entre las 20.30 y las 22.30, coincidiendo con la salida del trabajo de mucho ciudadanos, cuando el servicio apenas fue del 20 por ciento.

El resto del día el servicio fue el habitual de un día laborable, aunque las alteraciones por la huelga comienzan antes y se alargan hasta después de las horas indicadas a causa del tiempo que hay que prever para las maniobras de retirada e incorporación de los trenes.

Tras las aglomeraciones de la mañana y última hora de la tarde, Transports Metropolitans de Barcelona admitió que la oferta de servicios mínimos decretados por la Generalitat «está resultando insuficiente para absorber eficazmente la demanda en las franjas de afectación, que incluyen las de más afluencia de viajeros». Aunque TMB recomienda buscar medios alternativos de transporte, su presidenta y concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Mercedes Vidal, pidió al departamento de Trabajo que rectifique y reconsidere que la rebaja de servicios mínimos ha sido una irresponsabilidad.

Vidal insistió en la idea de que la huelga no sirve para solucionar el problema por lo que volvió a instar a los actores implicados a sentarse en una mesa de negociación para abordar el convenio colectivo, tal y como se hizo con los trabajadores del bus.

Esta nueva hornada de huelga empezó la madrugada del sábado coincidiendo con el festival de música Sónar, también hubo paros para el Primavera Sound, y se alargará hasta mañana.