Trias culpa a la oposición de aplazar la candidatura a los Juegos de invierno

Después de semanas mareando la perdiz, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, hizo saber ayer a los alcaldes implicados en el proyecto que la ciudad no optará a organizar los Juegos Olímpicos de invierno de 2022. El alcalde apuntó que desde el COI le desaconsejaban la candidatura de Barcelona, pero los verdaderos motivos, dijo, responden a la falta de consenso político y de interés del Gobierno por los deportes de invierno. No obstante, Trias, como de costumbre, aseguró que la decisión no es definitiva hasta que, «en los próximos días hable con todos».

Las cartas, en cualquier caso, están sobre la mesa y, salvo sorpresa mayúscula, Barcelona pospondrá su candidatura. No en vano, esa era una de las exigencias del PP municipal, centrarse en salir de la crisis antes que emprender una nueva aventura que supondría un considerable esfuerzo para las arcas públicas. La decisión final, en cualquier caso, parece que se sabrá hoy en el pleno municipal.

Trias explicó que, pese a que el COI le desaconsejó la candidatura para 2022, sí que lo animaron a intentarlo cuatro años más tarde. «El presidente tiene una estima tan grande a Barcelona que me ha dicho que cuando nos presentamos tenemos que ganar», dijo el alcalde. Para el convergente, sería un «suicidio» proponer una candidatura sin el apoyo de socialistas y populares, los dos partidos que pueden gobernar España y de los que depende la apuesta deportiva y en infraestructuras. Esta semana los grupos municipales del PP, el PSC e ICV-EUiA ya han manifestado sus reticencias al proyecto.

A lo largo de las dos horas de reunión, Trias expuso sus impresiones de los recientes encuentros con miembros del Comité Olímpico Español, del Gobierno español, de las federaciones de deportes de invierno y del Comité Olímpico Internacional, así como las dificultades para conseguir un consenso en el Ayuntamiento. Los alcaldes y las diputaciones han aplaudido que Trias garantizara el mantenimiento de la candidatura y mostraron su predisposición a que se posponga cuatro años. «Lo más importante es que no se tire la toalla de la apuesta olímpica», explicó el alcalde de La Seu d'Urgell, Albert Batalla.

Tras escuchar las explicaciones de los alcaldes, Trias les reiteró su compromiso con la candidatura y que su decisión final depende de la posición de los grupos de la oposición en el pleno del ayuntamiento que se celebra este viernes.

La oposición se volvió a mostrar muy crítica con las indecisiones y las excusas de Trias. El presidente del PP en el Ayuntamiento, Alberto Fernández, le exigió que «lidere la ciudad, asuma riesgos». El popular recordó que la abstención de su partido no impide que Trias cuente con mayoría en el pleno para poner en marcha la candidatura, pues el PSC y ERC apoyan la convocatoria. «No puede esconderse y huir, no puede buscar pretextos y excusas», y mucho monos adjudicarle el papel de «torpedeador». El alcalde Trias y sus excusas han sido duramente criticadas por la oposición. El líder del PSC en Barcelona, Jordi Martí, apuntó que «el principal adversario de los Juegos es el propio alcalde». «Tiene que estar dispuesto a arriesgar. Habrá gente a favor y en contra, pero se necesita que le brillen los ojos, y al alcalde no le brillan», resumió el socialista barcelonés.