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Cerrado por vacaciones

Las obras del Corredor del Mediterráneo están paralizadas desde Fallas y seguirán hasta que termine la Semana Santa

El ancho ibérico es mayor que el internacional. El tercer hilo se instala para adaptarlo al utilizado en Europa
El ancho ibérico es mayor que el internacional. El tercer hilo se instala para adaptarlo al utilizado en Europalarazon

Las obras del Corredor del Mediterráneo están paralizadas desde Fallas y seguirán hasta que termine la Semana Santa

Las Fallas y la Semana Santa han paralizado las obras de instalación del «tercer carril». Tres semanas sin trabajos, la normalidad volverá el 29 de marzo, que ponen sobre la mesa la complejidad que entraña la planificación de la solución adoptada por el Ministerio de Fomento para adaptar al ancho internacional el eje Mediterráneo. A día de hoy, Adif, la empresa pública encargada de las obras, no ha dado justificación técnica sobre el calendario de trabajos.

La parte positiva de esta decisión se la llevan los 15.000 usuarios que diariamente utilizan las Cercanías y que han visto cómo se recuperan las frecuencias suprimidas. Renfe inició el 1 de agosto un reajuste de los horarios en estos servicios además de en Media Distancia y Larga Distancia que cubren el trayecto Valencia- Castellón.

La previsión era que a partir de septiembre se pudiese recuperar, aunque fuese parcialmente, la normalidad del servicio, pero los problemas se han agravado. Desde entonces y salvo este paréntesis, se ha ofrecido casi la mitad de los servicios (de 40 a 22).

El punto de mayor conflictividad es entre Alquería y Almenara. Solo se puede utilizar una vía y se convierte así en un embudo que provoca retrasos.

Mientras, la Generalitat reclama mayor planificación y sobre todo más información por parte de Adif. La falta de conexión entre Fomento y el Consell llegó hasta tal punto que el secretario autonómico de la Conselleria de Vivienda, Josep Vicent Boira, optó por realizar un reconocimiento a pie de vía para conocer el estado de las obras.

Las conclusiones de este viaje, en el que recorrió el tramo entre Valencia y Benicàssim, son alarmantes. El «tercer hilo» está instalado en una única vía- así es como está previsto- desde la salida de Valencia hasta Benicàssim.

Sin embargo, en su inspección Boira detectó la existencia de 28 puntos, que coinciden con los cambios de vía, en los que no está instalado el raíl de ancho internacional. Tampoco se han iniciado las obras en el túnel de Serrería, imprescindible para permitir la salida de la ciudad de Valencia.

De Benicàssim hasta Tarragona la situación se complica. El secretario autonómico advirtió de que las traviesas son polivalentes, es decir, que técnicamente es imposible acoplar un tercer carril y por tanto, habría que cambiarlas todas.

También evidenció el escaso número de trabajadores. Aunque Adif no se ha encargado de desmentir ninguna de las afirmaciones realizadas por Boira, sí es cierto que siempre ha indicado que los trabajos se realizan por la noche, precisamente para reducir al máximo las molestias a los usuarios.

El ritmo de las obras es todavía difícil de comprobar. La ministra de Fomento, Ana Pastor, se comprometió la semana pasada a que el AVE Valencia y Castellón estará en funcionamiento en agosto. Del resto no hay fecha concreta, por lo que la conexión con ancho europeo sigue siendo incierta.

Medidas para compensar a los usuarios

Renfe volverá a reducir los servicios a partir del 29 de marzo. Habrá 23 trenes de cercanías, por sentido, en la línea C-6 Valencia-Castellón. Para completar la oferta se programan diez servicios especiales de autobuses lanzadera entre València Nord, y Castellón. Los autobuses tendrán paradas en las estaciones de València Cabanyal y Sagunt. La Generalitat pidió también bonificar el 50 por ciento del precio del billete para compensar. Renfe no ha respondido a esta cuestión.