Cómo introducir y preparar los suplementos

Es importante calcular qué cantidad hay que dar y hacerlo en cantidades pequeñas para que el bebé no tarde en volver a mamar

Puede que hayan surgido algunos problemillas con el inicio de la lactancia y tengas que suplementar la toma de pecho. Lo ideal antes de dar un suplemento de fórmula es valorar y solucionar las dificultades, porque dar un suplemento no sirve para resolver todos los problemas y puede poner en riesgo la lactancia. Primera y principal: si puedes no hay mejor suplemento que la leche de la propia madre, pero el estrés y el cansancio no es buen aliado ni de la oxitocina ni del extractor, así que aun teniendo leche puede que no sea fácil obtenerla y debas recurrir a los suplementos de fórmula. En este caso es importante hacerlo bien para que el suplemento no se convierta en la alimentación exclusiva del bebé ni sea un riesgo para su salud.

Se recomienda que el bebé mame frecuentemente los primeros días, unas 10-12 tomas de pecho repartidas durante el día y la noche. En ocasiones el realizar menos tomas al inicio de la lactancia puede ser la causa de dificultades como por ejemplo que el bebé no recupere el peso. Asimismo el hecho de tener mucho tiempo al bebé enganchado al pecho no es sinónimo de que este alimentándose. Antes de recurrir a los suplementos, es mejor probar a poner más veces el bebé al pecho y asegurarse de que la toma sea efectiva.

Cuando no hay más remedio que recurrir al suplemento, es importante calcular la cantidad de suplemento a ofrecer, mejor cantidades pequeñas después de las tomas del pecho, que más cantidad repartida en menos tomas al día, ya que de este modo el bebé dormirá más tiempo después de esas tomas en las que hemos dado mayor cantidad de suplemento y tardará más horas en mamar. Así, los picos de prolactina disminuirán y se pondrá freno a la producción de leche. A modo de ejemplo, si me han recomendado 30 mililitros tres veces al día, lo más adecuado no es dar 3 tomas de 30 de suplemento al día, sino repartir esos 90 de leche de fórmula en todas las tomas del día, excepto en las tomas de la noche. Recuerda que es cuando los picos de la hormona que produce la leche son más altos, así que a más tomas nocturnas más leche materna y el deseo es tener más leche ¿no? De esta manera para aumentar la producción de leche materna, es importante asegurar unas 12 tomas de pecho, y repartir esos 90 (o la cantidad recomendada) entre las tomas diurnas. De este modo, al ofrecer 10 mililitros después de las tomas de pecho, garantizas el suplemento recomendado y no menguas la cantidad de leche materna. Recuerda que la alimentación con fórmula también es a demanda (nada de cada 3 horas). Dar el pecho a demanda y el suplemento cada 3 horas, además de ser agotador para la madre, la mayoría de las veces garantiza el fracaso de la lactancia. Cuando se ofrece suplemento a un bebé y demanda la siguiente toma más allá de las dos horas, quizás le estamos dando demasiada cantidad de suplemento. También hay que tener en cuenta que algunos priorizan dormir a comer.

El ofrecer pequeñas cantidades de suplemento permite utilizar técnicas de suplementación que interfieren menos en la lactancia, como la técnica del dedo jeringa que no interfiere en la lactancia como sucede con el biberón, y permite ofrecer pequeñas cantidades (10-20-30 mililitros), que además podemos enseñar al padre cómo hacerla. Personalmente, es de las cosas que más me gusta enseñarles porque ves la satisfacción que les produce notar en su dedo lo más parecido a lo que la madre siente cuando el bebé mama del pezón.

Además, es una forma de realizar una estimulación oral muy importante para aquellos bebés que presentan disfunciones. La próxima semana hablaremos de cómo preparar y retirar los suplementos de fórmula.

Pueden enviar sus preguntas a consultalactancia@larazon.es