Valencia

El gerente de la EMT fue director en la empresa relacionada con el escándalo de los relojes de Alfonso Grau

El gobierno de Ribó ha prorrogado el contrato a la firma de Urbano Catalán, que fue investigado por cohecho

El gerente de la EMT fue director en la empresa relacionada con el escándalo de los relojes de Alfonso Grau
El gerente de la EMT fue director en la empresa relacionada con el escándalo de los relojes de Alfonso Graularazon

El gobierno de Ribó ha prorrogado el contrato a la firma de Urbano Catalán, que fue investigado por cohecho

Cuando saltó el escándalo de la estafa a la EMT de Valencia el mes pasado, dos nombres centraron las todas las miradas, el concejal de Movilidad y presidente de la Empresa Municipal de Transporte, Giuseppe Grezzi, y su director gerente, Josep Enric García Alemany. Del primero, por ser uno de los ediles más mediáticos y polémicos (azote de Rita Barberá en la oposición) se sabe casi de todo; del otro se conoce menos.

Se sabe que tiene 42 años y que es Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos por la Universitat Politècnica de València y que, en medio del escándalo del fraude, le subieron el sueldo 5.000 euros anuales para disgusto de todos los partidos políticos menos de Compromís, al que pertenece Grezzi, al que le une una buena amistad, y el alcalde Joan Ribó.

Y aunque es público, también es menos conocido que García Alemany fue director de la oficina de proyectos del Grupo Transvia, empresa que, entre otros servicios, ofrece el del Bus Turístic que recorre la ciudad transportando a alemanes, británicos e italianos y el de algunas líneas de autobús interurbano y escolar.

A Transvia y a la EMT les unen un pasado y un presente de titulares escandalosos. El director general de Viajes Transvia Tours, Urbano Catalán, fue investigado como presunto autor de un delito de cohecho junto al ex vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, «por unos hechos que se remontan a 2010 cuando el entonces vicealcalde adquirió un reloj de oro por 25.680 euros que fue satisfecho parcialmente mediante la devolución de otro que costaba 13.500 euros y que le fue regalado por Urbano Catalán y facturado a su empresa, Viajes Transvia», según recuerda hoy esdiario.com. Ambos fueron investigados por un supuesto delito de cohecho, el empresario como parte activa del delito y el exvicealcalde, como parte pasiva del cohecho.

Este diario digital hace memoria y explica que este mecanismo se descubre a finales de 2015, cuando el juzgado recibió una denuncia de la Fiscalía contra Grau y Catalán. «Según el escrito fiscal, la contratista del Ayuntamiento regalaba supuestamente a cambio de contratos relojes de alta gama al exvicealcalde, que el exedil del PP en el consistorio presuntamente cambiaba por otros de precio superior y abonaba la diferencia, sistema que constituiría un blanqueo».

García Alemany ocupó el cargo de director de la oficina de proyectos del Grupo Transvia en octubre de 2014. Justo un año después, el Gobierno de Ribó le fichó como director gerente de la EMT, donde actualmente cobra 75.000 euros brutos anuales.

El mismo Ayuntamiento que pese a criticar cuando estaba en la oposición que se prorrogara el contrato a Transvia del Bus Turístic sin concurso (operación por otra parte legal) volvió a renovar el pasado 5 de junio dicho contrato, tal y como vienen haciéndolo desde que accedieron al Gobierno en 2015.

Grezzi justifica ahora estas renovaciones en que son necesarias para «garantizar el servicio mientras se ultima el próximo proyecto». El consistorio no recibe canon alguno por la prestación, como sí ocurre en otras ciudades, donde supone más de medio millón de euros al año que Valencia deja de ingresar.