Valencia

La AVL desacredita a Punset y sus afirmaciones sobre el valenciano

Ramón Ferrer ratifica la importancia de la lengua

Ramón Ferrer, presidente de la AVL, en el acto de presentación
Ramón Ferrer, presidente de la AVL, en el acto de presentaciónlarazon

El presidente de la Academia Valenciana de la Llengua (AVL), Ramón Ferrer, desacreditó las declaraciones vertidas por Carolina Punset sobre el valenciano. «El valenciano es fundamental y de aldeanos, nada» sentenció Ferrer durante la presentación del «Oracional valencià», la primera obra religiosa editada por la institución valenciana.

«Hay una cosa muy clara, comparen ustedes con lo que dijo el resto y entonces verá que si todos los coches van en contradirección suya, la que se ha equivocado es usted» añadió sobre las declaraciones poco acertadas de la portavoz de Ciudadanos en les Corts Valencianes. A pesar de ello, Punset matizó ayer sus palabras afirmando que ella apostaba por un modelo trilingüe y corroboraba que no tenía nada en contra del valenciano.

Siguiendo con el acto de presentación, los creadores del «Oracional en valencià» concretaron que la consideran como el último legado del fallecido Pere Maria Orts. Además, «El Oracional es un niño pequeño que en sociedad se hará grande» añadió Antoni Ferrando, secretario de la Comissió de Textos Religiosos.

También manifestaron que la labor de la AVL con la Iglesia no había terminado aquí y que su pretensión era garantizar nuevas herramientas para que la gente pueda leer en su lengua, «el valenciano». Todo un reto ya que su intención es normalizar el uso de esta lengua en la Iglesia.

Durante el acto se ratificó que el «Oracional valenciano» y sus diez capítulos, no buscaban ser un libro oficial para el culto ni el ansiado «missal en valencià», un proyecto que lleva paralizado desde 2002 por los arzobispos Agustín García-Gasco y luego por Carlos Osoro.

De hecho, a pesar de la fría recepción del Arzobispado de Valencia sobre la obra y la falta de representación de la propia institución durante el evento, Ferrer restó importancia al asunto afirmando que había recibido «personalmente» una carta del arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, que se encontraba el Lourdes pero que solicitaba una entrevista con el presidente de la AVL ya que estaba muy ilusionado con el proyecto que habían presentado.