Ribó presenta sus Presupuestos en medio de la polémica

Los presupuestos del Ayuntamiento de Valencia para 2020 serán “los más altos de la historia”, con 898,4 millones de euros, priorizarán los servicios a la ciudadanía y el consistorio espera ser el primer gran municipio de España en aprobarlos, antes del 22 de diciembre.

Así lo ha manifestado el alcalde, Joan Ribó, en la rueda de prensa que ha ofrecido este martes junto al concejal de Hacienda, Ramón Vilar, quien ha destacado que estos presupuestos demuestran la “cohesión” del Gobierno municipal en momentos fundamentales, y ha avanzado que 2019 acabará con una deuda de 374 millones de euros y se prevén 12,5 millones de ahorro en gastos financieros.

Ribó ha destacado por su parte que el consistorio “ha salido del agujero económico del pasado y del plan de ajuste que suponía grandes limitaciones”, y ha señalado que en el ejercicio de 2020 actuará con “previsión” para afrontar una eventual desaceleración económica global.

En cuanto a los gastos, se aumentarán un 7,4 por ciento los de personal respecto a 2019 y se destinarán 21 millones a reforzar los servicios municipales, mientras que se invertirán 31 millones de euros en gastos corrientes en bienes y servicios y transferencias (un 8 % más).

Así, Ribó ha avanzado que se destinarán 74,9 millones a limpieza y recogida de residuos; 67,8 millones al incremento de la red y necesidades de personal de la EMT; 29,7 millones a jardinería sostenible; 19,1 a mantenimiento del alcantarillado y 5,5 millones a las vías urbanas, 34,1 millones a Bienestar Social y 500.000 euros a “València Capital Disseny”, entre otras partidas.

Como inversiones, ha destacado los 17,2 millones para el ciclo integral del agua; 4,7 millones para el Edusi en el Cabanyal; 1,1 millones al proyecto de edificios inteligentes; 6 millones a la urbanización de la plaza de la Reina; 1,3 millones para la reurbanización de la plaza de Brujas y 1,1 millones para la modernización del Palau de Congresos.

En cuanto a los ingresos, Ribó ha informado de que se aumentará la “equidad, la mejora de la gestión y el refuerzo de la inspección de los impuestos municipales”, que supondrán un incremento de 18 millones de euros.

Así, se aumentarán las tasas del alcantarillado que, junto con la incorporación de la financiación necesaria, permitirá doblar la inversión destinada a la mejora y mantenimiento del alcantarillado, alcanzando los 24 millones, mientras que se rebajarán las tasas sociales en 3,5 millones.

Falsa polémica

El concejal de Hacienda, Ramón Vilar, ha lamentado la “falsa polémica” que se genera en torno a las tasas municipales, ya que ha defendido que aspectos como el agua no son solo cuestiones de recaudación sino que responde a la necesidad de crear una concienciación de que el consumo de agua “no puede seguir siendo a la carta” al ser un “bien escaso”.

Vilar ha destacado, además, que en estos presupuestos hay una “gran batería de bonificaciones”, como las que beneficiarán a los vehículos de contaminación cero, que podrá aparcar en la ORA sin pagar, o en el importe de circulación a vehículos no contaminantes, la eliminación del copago en los centros de día, y mejoras fiscales para la Ciutat Fallera.

“Estamos en una situación de endeudamiento perfectamente asumible”, ha añadido, y ha asegurado que la dotación en contingencias está “por encima de lo que son los requisitos legales”.

Ahora bien, ha precisado que el Consistorio “no renuncia” al contrato-programa, a la “sensibilidad frente a la necesidad de un ingreso para la sostenibilidad turística” y a la demanda de una mejora de la financiación de los ayuntamientos. EFE