Cae el capo indio del crimen organizado

No sólo eran delitos contra la propiedad industrial con productos importados de forma ilegal y su posterior blanqueo de capitales. Los agentes de la Policía Nacional también hallaron en los registros domiciliarios precursores para la fabricación de droga, según fuentes policiales. Unos componentes químicos que venderían a redes del narcotráfico para cortar cocaína y con los que sacarían importante beneficios económicos. El líder de la trama sería Harischadra Taranchand Varma, un indio nacionalizado español sin antecedentes policiales que vivía en un lujoso chalé de Conde Orgaz. La «operación Prima», desarrollada por la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, se ha saldado –hasta el cierre de esta edición, porque la operación continúa abierta– con 60 detenidos, principalmente de origen indio aunque la Fiscalía Anticorrupción ha ordenado 78 detenciones y 150 registros.

Varma, al parecer, dirigía la compleja estructura con sociedades creadas directamente para defraudar a Hacienda. Así, habría defraudado decenas de millones de euros con productos importados. Sobre todo compraban sus productos a los comerciantes chinos, según las mismas fuentes. La principal «baza» que tenían preparada para las navidades eran Ipads a precios irrisorios, según fuentes policiales. Con su venta pretendían hacer el «agosto» que han frustrado los agentes de la UDEF.

Los agentes encargados de la investigación que ha propiciado el arresto del capo indio del crimen organizado realizaron ayer ochenta registros en locales de toda la región, aunque la trama operaba también en otras cinco comunidades autónomas. Además de los registros, el Juzgado número 5 de Fuenlabrada, encargado de las diligencias de este caso, ordenó ayer que se bloquearan centenares de cuentas bancarias y se intervinieran numerosos inmuebles y vehículos de la organización. El modus operandi de la trama era sencillo: dedicados a «importar» a la Unión Europea productos textiles, electrónica y distintos componentes de fotografía desde China, declaraban en la aduana cantidades inferiores a las que realmente introducían en España para rebajar los aranceles. En este momento cometían un fraude en la aduana, pero no era la única ilegalidad en la que incurría la organización, que también disponía de un entramado complejo de empresas «trucha», «pantalla» y finalmente las distribuidoras con las que cometían el fraude del IVA, informaron a Efe fuentes de la investigación.

Otra de las actividades delictivas de la organización era la compra de productos de marca auténticos a bajo precio por liquidación que mezclaban con otros falsificados que vendían como verdaderos, por lo que se les imputa también un delito contra la propiedad intelectual e industrial. Además, la red se dedicó a importar desde India píldoras similares a la Viagra despachándolas como chucherías en aduanas, donde presuntamente tenía un contacto que le ayudaba a pasar las pastillas. También se les atribuye falsedad de documentos oficiales y mercantiles, ya que, según las fuentes, vendía facturas falsas a otras empresas para ocultar actividades ilícitas. Algunos de los lugares en los que los investigadores han practicado detenciones y registros son los polígonos industriales de Cobo Calleja y de Los Gallegos, en la localidad madrileña de Fuenlabrada y donde existen numerosas naves de productos al por mayor. Precisamente, la presencia de numerosos agentes en Cobo Calleja generó mucha sorpresa entre los trabajadores y los clientes que ayer acudieron al polígono industrial, que ya en 2012 fue objeto de una gran redada.