Delincuentes especializados

Aunque la palabra alunizaje tiene que ver con la Luna, es como se ha definido a la utilización de un vehículo sustraido para introducirse en un escaparate y robar en su interior. Delito recogido en el Código Penal como robo con fuerza y castigado con una pena de uno a tres años, por lo que es muy difícil que un juez mande a alguien a la cárcel. Hemos padecido durante años una ola de alunizajes donde apreciamos la especialización de estos delincuentes, incluso familiar, para llevar a cabo sus delitos. Conocidos por ello eran «el niño Sáez», «el niño Juan», «Carlos Jarry» (asesinado, se cree, por su propia banda), «el Piojo»... motes que se les ponía por lo pronto que empezaban con sus fechorías acumulando cada uno más de 50 antecedentes por todo tipo de delitos.Estos últimos años, la presión policial ha ido consiguiendo, con operaciones policiales espectaculares, que descienda este modus operandi. Se blindaban con controles las carreteras que rodean Madrid, y sabían en cual no había. Cuando se ponía en marcha por las noches el helicóptero policial, escapaban en dirección Barajas (por allí no puede volar). Pero montaron un servicio de control fuera del aeródromo para ver cuándo despegaba el helicóptero y así no actuar. Al final, han entendido que es más fácil y sacan más beneficios haciendo butrones.